La periodista y escritora viguesa Cristina Losada se estrena en la vida política como candidata de Ciudadanos a la Xunta y número 1 por A Coruña. Vinculada hace décadas al grupo troskista Liga Comunista Revolucionaria para luchar contra el franquismo, abandonó su ideología de izquierdas tras ver celebrar a compañeros de partido los atentados del 11-S. Ahora es la cabeza de cartel de Ciudadanos, un partido que define de centro, constitucionalista y antinacionalista y desde el que pretende controlar el futuro gobierno de Feijóo si no logra la mayoría absoluta el domingo.
-¿Votar a C´s significa hacer a Feijóo presidente?
-No. Significa que hay dos alternativas. El escenario más previsible es un gobierno de mayoría absoluta del PP frente a otro en el que necesite negociar con Ciudadanos para tener un gobierno vigilado y controlado.
-¿Qué cambiaría si ustedes tienen la llave del Gobierno gallego?
-Negociaríamos con el PP para conseguir cambios para avanzar hacia una economía más sólida que permita un empleo estable y de calidad en Galicia. Y también para revertir los recortes en sanidad y educación y que las instituciones sean transparentes y rindan cuentas.
-¿Qué diferencias entre su programa y del PP les permitirían controlar a Feijóo?
-En economía planteamos una reforma del Servizo Público de Emprego de Galicia para que deje de ser una mera oficina de parados, un plan de choque contra el paro de larga duración, una reforma de la formación para que los empleados puedan elegir los cursos y así evitar tramas de corrupción y un plan de empleo verde. En sanidad apostamos por homogeneizar las prestaciones para que no haya diferencias entre el rural y las ciudades además de despolitizar la gestión sanitaria. Y en educación abogamos por universalizar la educación infantil de 0 a 3 años para favorecer la conciliación laboral.
-C´s exigió al PP en Madrid expulsar a cargos públicos investigados por corrupción y eliminar los aforamientos ¿Le pedirán lo mismo a Feijóo respecto a Baltar si tienen que negociar con él?
-Es otra de las medidas que planteamos. A nivel nacional y municipal hemos exigido que se aparte de la vida pública a investigados por corrupción. Y en Galicia eso incluiría al presidente de la Diputación de Ourense al estar investigado por cohecho por pedir favores sexuales a cambio de otorgar un empleo público.
-No es lo mismo entonces votar al PP que a Ciudadanos.
-No vamos a dar un cheque en blanco. Vamos a impulsar cambios para que Galicia sea una tierra de oportunidades. No es lo mismo no solo por la diferencia de programa sino porque nosotros tenemos una nueva forma de hacer política que no se basa en la confrontación y sí en los acuerdos. Somos un partido de centro y estamos dispuestos al diálogo con los partidos constitucionalistas pero no con los que quieren romper el marco constitucional.
-En el caso de que Feijóo no atienda sus propuestas, ¿dejarían gobernar a una alternativa de izquierdas?
-Pensamos que la previsión más realista de lo que va ocurrir el 25-S es una nueva mayoría absoluta del PP o que sea la lista más votada pero que necesite a Ciudadanos. La experiencia en otras comunidades y a nivel nacional demuestra que se puede a llegar a acuerdos.
-Pero si se diese ese caso...
-No voy a valorar escenarios poco realistas y poco previsibles de una alternativa de izquierdas. Aunque la realidad tampoco es la que plantea Feijóo del PP o el caos de un batiburrillo de partidos. Es la del PP solo o controlado por Ciudadanos.
-Desaprueba entonces una alianza de los partidos de izquierdas en la Xunta.
-En Galicia se vivió una experiencia negativa con el bipartito entre el PSdeG y el BNG. No vemos que ahora vaya a ocurrir algo similar según lo que apuntan las encuestas. Me parecería un mal gobierno teniendo en cuenta que son partidos que tienen planteamientos muy distintos entre los que hay una formación nacionalista y otra populista.
-Es decir, descarta cualquier tipo de acuerdo en la Xunta con socialistas, mareas y nacionalistas.
-Con los socialistas no lo descarto puesto que, por ejemplo, ya lo hemos hecho a nivel nacional con Rivera y Sánchez. Pero no parece que el PSdeG vaya a ser la lista más votada y además debería decidir si se alía con partidos que quieren romper el marco constitucional y otros que son populistas o está dispuesto a negociar con formaciones constitucionalistas. Preferiría que estuviese en la segunda posición pero no depende de mí.
-¿Por qué considera que el nacionalismo es un problema en Galicia?
-El nacionalismo excluyente tiende a dividir y a buscar enemigos internos y externos. No queremos una Galicia empequeñecida y cerrada porque las soluciones a los problemas de los gallegos también se tienen que buscar en España y en Europa.
-¿Pero cree que en Galicia el nacionalismo tiene el mismo significado que en Cataluña?
-Es evidente que no tiene el mismo peso que en Cataluña y no parece que el BNG vaya a obtener un gran resultado el 25. Pero lamento que las otras fuerzas que han aparecido a la izquierda del Partido Socialista estén también impregnadas de nacionalismo y propongan referéndums separatistas de los estamos en contra.
-Se les achaca que en su programa no incluyen propuestas específicas para Galicia.
-Se trata de una percepción que se ha difundido de manera interesada por algunos partidos y sectores. Ciudadanos Galicia es un partido gallego cuyos afiliados y simpatizantes viven y conocen Galicia. El programa ha sido elaborado por expertos de distintos ámbitos y siempre hemos tenido propuestas para la comunidad.
-También se les critica porque no defienden la identidad gallega.
-Hay muchos interesados en atacar a Ciudadanos y esa es una buena señal porque frente a unos proyectos políticos anquilosados estamos recogiendo demandas de la sociedad gallega.
-Otro ejemplo es la bandera de Galicia que colocaron al revés en el autobús de campaña.
-Fue simplemente un error técnico que afectó a uno de los emblemas gallegos. Es significativo que a ese error se le dé tanta importancia y no se opine sobre nuestra gestión en los ayuntamientos donde estamos que es lo que debe valorarse en un partido político.
-¿A qué se debe que tras pedir la liquidación del AVE gallego ahora lo incluyan ahora en su programa?
-Ciudadanos siempre dijo que las obras en marcha debían terminar y consideramos que el AVE es fundamental para Galicia y, de hecho, el acuerdo con el PP en Madrid introduce el compromiso de finalizar los trabajos en el plazo acordado. Es una prioridad aunque criticamos que las infraestructuras en España que son de Estado se hayan presentado como si fuesen de un partido y también la planificación errónea en infraestructuras como aeropuertos sin aviones.
-¿Por qué usted se presenta por la provincia de A Coruña siendo de Vigo?
-No es una cuestión relevante ni un caso único. Son unas elecciones autonómicas. Todos somos gallegos y lo mismo ocurre con otros candidatos que son o viven en una provincia y se presentan por otra. Presentarse por una provincia u otra son criterios que cada partido debe decidir.
-En esos criterios se incluyen de que hay más posibilidades de sacar escaños en A Coruña que en otras provincias.
-Son estudios que todos los partidos desarrollan en qué punto se quiere reforzar una candidatura.
-¿Qué opina de qué la reforma electoral que propone C´s con más proporcionalidad de voto a las comunidades con más población afectaría a los diputados gallegos en el Congreso?
-La ley electoral de los 80 se ha quedado obsoleta. Queremos mejorar la representatividad de los ciudadanos y hay vías para hacerlo sin perjudicar a ninguna provincia. De todas formas, el Congreso no es una Cámara territorial y los diputados no votan a su comunidad sino por su partido.
"Buscamos un equilibrio entre las dos lenguas cooficiales. El modelo actual no funciona"
- -¿Hay libertad lingüística en Galicia?-En la sociedad no hay ningún problema con las lenguas porque tanto los gallegos que hablan principalmente gallego como los que lo hacen en español nos entendemos perfectamente. Son las instituciones las que deben reflejar esa sociedad bilingüe y dirigirse a los ciudadanos según su elección. Lo que nos parece mal es que se politice el idioma y se utilice como arma arrojadiza.-¿Ve viable que esa elección del idioma pueda aplicarse en las aulas?-Proponemos un modelo trilingüe en el que el gallego y el español sean lenguas vehiculares y luego una tercera que sería el inglés. Tiene que ser viable en la medida que la mejora de los servicios públicos es posible si se gestionan mejor los recursos.-¿Se usa mucho el gallego en la educación?-No pensamos que se use mucho o poco. Buscamos un equilibrio entre las dos lenguas cooficiales. Ahora hay un modelo que no está funcionando y por eso queremos cambiarlo.-A usted precisamente se le acusa de hablar casi siempre en castellano.-Los políticos debemos actuar como la sociedad. Doy entrevistas en gallego y español indistintamente y con normalidad igual que lo hace la sociedad.
