Repsol elevó su beneficio neto ajustado un 8% en el primer trimestre, hasta los 616 millones de euros. Según recalcó la compañía, las medidas adoptadas en su plan de sinergias y eficiencias, los mayores volúmenes de producción y la subida de los precios del crudo y del gas apuntalaron su cuenta de resultados, en la que se refleja que el ebitda se situó en 1.804 millones de euros a cierre de marzo, un 2,2% inferior a los 1.844 millones de euros logrados en el primer trimestre de 2017. Sus acciones reaccionaron en Bolsa con una subida del 0,72% y conquistaron el nivel de los 16 euros.