Los vehículos impulsados por gasolina se convirtieron el año pasado en el tipo de automóvil más vendido en el mercado europeo, por delante de los diésel por primera vez desde 2009, tras una caída de la cuota de mercado de estos de 5,1 puntos porcentuales respecto al ejercicio precedente (del 49,9% al 44,8%). Así, los vehículos de gasolina representaron casi la mitad de las ventas de turismos en Europa en el curso pasado, con un 49,4% del total de matriculaciones, según datos de la Asociación de Constructores Europeos de Automóviles (ACEA).

En 2017, según la Agencia Europea del Medio Ambiente (EEE), las emisiones medias de dióxido de carbono (CO2) de los vehículos nuevos aumentaron un 0,4%, hasta 118,5 gramos por kilómetro, lo que se traduce en la primera subida anual desde que comenzaron los registros.