La dirección de Grupo PSA se ha reunido con el Gobierno alemán para garantizar que la firma sí está cumpliendo los acuerdos sociales en las plantas germanas, pero ha advertido que la plena actividad de la marca en el país solo se podrá garantizar si alcanza los umbrales de rentabilidad . "Hay un plan de inversión previsto en cada centro de producción alemán y se pondrá en marcha, una vez se cumplan las condiciones de rentabilidad", ha indicado el grupo a través de un comunicado.

"El futuro de Opel", ahonda la nota. El encuentro se produjo entre el propio presidente de PSA, Carlos Tavares, con los ministros de Exteriores, Asuntos Económicos y Energía y Trabajo, Peter Altmaier y Hubertus Heil, respectivamente. A la reunión asistió también el director general de Opel, Michael Lohscheller.

"Seguimos comprometidos con la búsqueda de un acuerdo como parte de un proceso de cogestión con los interlocutores sociales alemanes en beneficio de los empleados de Opel", zanjó el grupo.