El grupo francés PSA, que integró a Opel el pasado agosto después de su compra a la estadounidense General Motors (GM), tildó de "pura especulación" los rumores acerca de las operaciones de Opel en Alemania, donde fuentes sindicales apuntan a una reducción de 800 empleados en la fábrica de montaje de Eisenach.

"Opel, con el apoyo de PSA, respeta actualmente todas las convenciones colectivas en vigor en materia de producción. Cualquier otra información no es más que pura especulación", afirmó en un comunicado el grupo automovilístico, que informó de que su presidente, Carlos Tavares, se entrevistó hoy con dos ministros alemanes, el de Economía y el de Trabajo.

Según informaciones publicadas por los medios alemanes, citando fuentes sindicales, PSA podría reducir la plantilla de Eisenach, en el estado de Turingia, de los 1.800 empleados actuales a un millar, al planear el montaje de sólo un todoterreno en esa planta de la marca alemana, que ahora trabaja con los modelos Adam y Corsa.

En su nota, PSA afirmó que tiene "un plan de inversiones para las plantas de Alemania" y lo condicionó a que se den las "condiciones de rendimiento" adecuadas, sin aportar una fecha. "Acuerdos conforme al rendimiento ya se han firmado en el Reino Unido, España, Polonia, Austria y Hungría. Seguimos comprometidos en buscar un acuerdo en el marco del proceso de cogestión con los sindicatos alemanes por el bien de los asalariados de Opel", recalca el grupo galo, que el pasado mes de agosto completó la adquisición de Opel, que cuenta con una planta en Figueruelas (Zaragoza).