La directora general de Volkswagen España acudió ayer a Vigo para la inauguración de las nuevas instalaciones de Percar en la avenida de Madrid, donde se encuentra "la mayor exposición de la marca alemana de España". Laura Ros (Barcelona, 1971) habla con FARO sobre la electrificación del fabricante alemán, el azote al diésel y el peso de las plantas del grupo en la industria de automoción gallega.
- ¿Qué representa Galicia dentro del negocio de Volkswagen?
-Es el sexto mercado más importante a nivel nacional. Tiene un peso muy relevante. La marca cerró 2017 en la cuarta posición del ranking y hemos arrancado este 2018 en la tercera. Las ventas está funcionando muy bien, con una gama completa y renovada. En cuanto a Vigo, cuenta con la exposición más grande de la marca en España.
- Este año aspiran a 100.000 unidades en ventas.
-Normalmente no damos previsión de ventas, pero sí. El año pasado cerramos con 89.500 unidades y estimamos que la nueva gama ampliada de SUV nos dé un crecimiento del 10% adicional que nos acercaría a esa cifra.
- ¿Han basculado las ventas hacia modelos de gasolina tras el escándalo de los motores diésel?
-Se nota un cambio de tendencia. Hay una demanda importante de motores gasolina, sobre todo en el canal particular. Pero el diésel sigue siendo la tecnología preponderante en las ventas a flotas o en los segmentos de vehículos más grandes. Todas las tecnologías tienen que convivir. Nuestra gama de motores diésel cumple con la normativa Euro6. Es verdad que tenemos que hacer más pedagogía sobre la tecnología actual, porque estos motores generan un 84% menos de NOx y un 95% menos de emisiones que los motores diésel de hace quince años; lo que hay que promover la renovación del parque.
- Pero cada vez más administraciones prohíben la circulación de los diésel en entornos urbanos.
-Defendemos que no se hable de una tecnología en concreto, sino que nos pongan unos umbrales de eficiencia que cumplir. Los motores Euro6, dentro de la DGT, tienen la etiqueta C. Por ejemplo, Madrid, que hasta ahora limitaba la circulación según la terminación de las matrículas par o impar, está ahora revisando su política para ajustarla al etiquetado de la DGT. Porque es el parque móvil de más de 15 años el que genera el 70% de las emisiones contaminantes.
- ¿Está superado el Dieselgate? En términos de imagen.
-Toda la renovación de producto nos ha ayudado a seguir siendo una marca atractiva para nuestros clientes. Los modelos que hemos estado comercializando cumplen con la normativa Euro6, y lo que sí nos ha servido es para impulsar otras tecnologías. Por ejemplo, el Golf es el único modelo en Europa disponible con todas las propulsiones posible: gasolina, diésel, híbrido enchufable, eléctrico y GNC (gas natural comprimido).
- Volkswagen aspira a vender un millón de eléctricos ya en 2025. ¿No es una cifra muy ambiciosa?
-No, nuestro compromiso es vender un millón de vehículos eléctricos todos los años a partir de 2025. Eso se apoya en una ofensiva de producto espectacular: vamos a lanzar veinte nuevos modelos eléctricos a nivel mundial. Ya hemos presentado cuatro en los últimos salones. Ahora tenemos dos eléctricos puros y dos híbridos enchufables. Empezaremos con un compacto en 2020 y le seguirá una versión SUV.
- ¿Qué frena el despegue de la tecnología eléctrica? ¿El precio?
-Es cierto, por eso para nosotros es clave el volumen y las economías de escala. Nuestra apuesta por el eléctrico está respaldada también en que somos una compañía global. El año pasado Volkswagen vendió a nivel mundial 6,2 millones de vehículos, más de la mitad de los cuales fueron en el mercado chino, y allí hay un gran interés en el coche eléctrico. Otros puntos importantes son la costa oeste en EE UU, el norte de Europa, Holanda? y creo que España, como segundo fabricante europeo, debe apostar por el vehículo eléctrico.
- ¿Echa en falta más ayudas para este tipo de vehículos? Las últimas se agotaron en un solo día.
-Eso demuestra que hay un interés real de los clientes por este tipo de tecnología. Es cierto que el precio, junto con la red de carga, pueden ser un freno, pero por lo que de verdad apostamos es por un cambio de fiscalidad. Lo que promovemos es un IVA reducido para coches eléctricos, híbridos enchufables o de gas natural.
- ¿Participarán las plantas españolas de los lanzamientos de estos nuevos eléctricos?
--Todavía no se han asignado las plantas. Es verdad que se van a invertir en 16 nuevas fábricas para el desarrollo de vehículos eléctricos. Que sea en España dependerá de la demanda.
- Volkswagen ya está en el podio de los mejores clientes de los proveedores gallegos.
-Una buena noticia para el sector fue la adjudicación de un segundo modelo para Navarra. El grupo había anunciado hace tres años una inversión de 5.000 millones en las plantas españolas, y 1.000 millones fueron para esa fábrica.
- ¿Cómo ve la irrupción del coche autónomo?
-Es algo que va a suceder, la única duda es el horizonte temporal en el que se hará realidad. La tecnología se está desarrollando exponencialmente. Aquí dependemos de la implantación del 5G. También estamos trabajando con proveedores que aportan tecnología de reconocimiento, como Mobileye, para interpretar el entorno que nos rodea? y en el desarrollo de la inteligencia artificial. Otros retos son los cambios legislativos y cómo se adaptará el coche autónomo a los diferentes estilos de conducción del mundo: no se circula igual en la India que en Madrid.
