La dureza de la crisis y el descenso de las ventas por la caída de la demanda interna obligó a muchas empresas gallegas a mirar hacia el exterior para mantener su actividad. Lo que en su día fue una obligación ahora se ve como una oportunidad de diversificar riesgos y fortalecer el negocio, lo que favorece el constante aumento de las exportaciones en Galicia. La comunidad gallega va camino de cerrar 2017 con el tercer récord consecutivo de ventas al exterior pues el balance entre enero y noviembre -a falta de incorporar las operaciones de diciembre- casi supera el de todo 2016. Las empresas gallegas enviaron a otros países productos por valor de 19.889 millones de euros en los once primeros meses del año pasado, un 8% más que en el mismo periodo del ejercicio anterior. Galicia solo necesitaría tres días de diciembre para superar el récord.

El motor principal de las ventas al exterior de la comunidad gallega son las manufacturas de consumo (fundamentalmente el sector textil), que concentran ya casi un tercio de las operaciones y afianzan su posición de liderazgo al registrar un incremento del 11%, hasta rozar los 6.160 millones. De hecho, el Instituto Galego de Estatística (IGE) destaca que las prendas de vestir y los combustibles y aceites minerales son los sectores que más tiran de las exportaciones entre enero y noviembre del año pasado, "destacando también los barcos y embarcaciones". Por el otro lado, las exportaciones de la automoción en Galicia cayeron un 10%, hasta los 3.245 millones a la espera del inicio del proyecto K9 en la factoría de Balaídos , que marcará el cambio de ciclo de la planta.

Por su parte, las importaciones escalan un 10%, hasta los 15.773 millones de euros por el repunte de las compras de combustibles y aceites minerales. Además, los papeles se invierten y mientras las manufacturas de consumo reducen sus compras a otros países un 12% (hasta 1.942 millones), el sector del automóvil las eleva un 8,5%, hasta los 4.415 millones. Esta evolución deja como resultado un alza de los pedidos al exterior del 10%, hasta los 15.773 millones de euros.

Estos datos dejan a Galicia con un superávit comercial de 4.115 millones de euros hasta noviembre, levemente inferior (-0,3%) al registrado en el mismo periodo de 2016. Es el segundo mejor saldo comercial de España, solo superado por el del País Vasco, 4.869 millones, que contrastan con el déficit de 22.694 millones del conjunto de España, que se vio perjudicada por un alza de las importaciones, que crecieron a un ritmo dos veces superiores que la ventas al exterior (un 11,1% frente al 9,1%).