La factoría de Opel en Zaragoza dio carpetazo al año 2017 con la producción de 382.425 vehículos. Se trata del primer balance de fabricación anual que realiza el centro aragonés tras la fusión de Opel con el grupo PSA.

Opel Figueruelas completa así su quinto ejercicio consecutivo elevando sus volúmenes de producción y se acerca a sus niveles de plena capacidad (480.000). Lo hace gracias, en parte, a su debut como centro multimarca, tras el cambio de dueño el pasado mes de agosto. Por primera vez en su historia, el centro zaragozano incluyó en su línea de producción un modelo no-Opel. Se trata del Citroën C3 Aircross, del que fabricó 37.034 unidades. Su producción se suma a las 196.424 unidades de Opel Corsa, los 68.172 de Opel Mokka, las 62.885 de Opel Crossland X y las 17.910 del Opel Meriva que dejó de ensamblar a partir de marzo.

En paralelo, PSA anunció ayer que creará un cuarto turno de producción en su planta francesa de Hordain para hacer frente al repunte en la demanda de vehículos comerciales y monovolúmenes, como los Peugeot Expert y Traveller y los Citroën Jumpy y SpaceTourer2. La compañía, que opera en Hordain mediante una joint venture con Fiat Chrysler Automobiles (FCA), anunció también la contratación de casi 600 empleados temporales hasta mayo de 2018.