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Sabadell y Abanca ganan aún más protagonismo en Nueva Pescanova

Compran, con los fondos Barendina, Auriga y Broadbill, la parte de Deutsche Bank

Exterior de la planta que tiene Pescanova en Chinandega (Nicaragua). // @gleznacho

La junta extraordinaria de Nueva Pescanova validó ayer, con la única abstención de HSBC, la venta de la participación que tenía Deutsche Bank en la pesquera. La entidad alemana mantenía un 0,46% y, como avanzó FARO, se deshizo de las participaciones a 0,25 euros el título. Banco Sabadell (primer accionista del grupo) y Abanca elevaron sus posiciones en la compañía, al igual que los fondos Barendina (Luxemburgo), Auriga (España) y Broadbill Investment Partners (Estados Unidos). Entre el banco que comanda Josep Oliú y el de Juan Carlos Escotet rozan ya el 30% de la multinacional gallega. La intención del núcleo duro de las entidades financieras fue desde un primer momento evitar la entrada de nuevos actores en el accionariado y solicitaron para ello disfrutar de acceso preferente a las que tenía Deutsche Bank, que decidió desinvertir al no considerar la de Pescanova una participación no estratégica. También se aprobó por mayoría el cambio de los estatutos, que permitirá a la empresa que preside Jacobo González-Robatto realizar cambios en el accionariado sin tener que someterlos a una asamblea.

En la junta, que se celebró en Chapela y se prolongó durante apenas 45 minutos, la dirección expuso los avances en el plan estratégico Todos a una 2016-2020, que "se cumple según lo previsto". La compañía no aportó ninguna información oficial del encuentro. Según fuentes vinculadas a la pesquera ésta cerrará el año con un Ebitda de unos 80 millones, en línea con las estimaciones más conservadoras después de haber padecido las consecuencias de un virus que afectó a la producción de langostino vannamei en las filiales de Nicaragua, Camanica y Serviconsa, y que causa la mortalidad temprana de los ejemplares. Esta subsidiaria es responsable de en torno a la mitad de exportaciones de marisco del país, y que el año pasado ascendieron a 137 millones de euros. En Nicaragua el grupo tiene unos 2.000 trabajadores y una de las plantas acuícolas más grandes de Latinoamérica, con 10.000 metros cuadrados de superficie.

Nueva Pescanova cerrará el curso en break even (escenario de rentabilidad), según anunció su consejero delegado, Ignacio González. En las próximas semanas prevé poner en vigor la construcción de siete buques (tres arrastreros fresqueros para Namibia y cuatro tangoneros para Mozambique), en los que invertirán 42,5 millones. Los construirá Armón en Vigo y Burela.

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