Los empleados de la factoría de Autoeuropa en Setúbal se reunieron ayer para decidir qué medidas emprender contra los nuevos horarios que la empresa instaurará a partir del próximo 29 de enero. Durante el plenario, un grupo de trabajadores exigió el comienzo de movilizaciones con dos días de huelga entre finales de enero y comienzos de febrero para revertir la decisión de mantener operativa la planta también los sábados a partir del próximo mes.

El motivo del conflicto se encuentra en los nuevos horarios que pretende instaurar la empresa para poder hacer frente al volumen de pedidos de su nuevo encargo estrella: el Volkswagen T-Roc. La compañía acordó hasta en dos ocasiones los nuevos horarios con el comité de empresa para, en una primera fase implantar la jornada de trabajo los sábados con 17 turnos semanales y, a partir de agosto, hacer lo propio también los domingos. Sin embargo el preacuerdo nunca pudo llevarse a la práctica por ser rechazado en ambas ocasiones por los trabajadores en una votación. Para desbloquear esta situación, la dirección de la compañía decidió imponer la jornada del sábado a partir del 29 de enero a cambio de que esta jornada tuviese el doble de remuneración que otra convencional.

De seguir adelante los planes de este grupo de trabajadores, esta factoría de Volkswagen viviría la segunda jornada de paros de toda su historia. La primera fue a finales del pasado mes de agosto, después de que los empleados rechazasen en una votación el preacuerdo alcanzado entre dirección y un comité de empresa cuyos integrantes se vieron forzados a dimitir.