Galicia seguirá en una "fase expansiva" durante el ya inmediato 2018. Lo dice la Xunta, que diseñó unos presupuestos con un escenario macroeconómico al alza, porque la comunidad "mantiene en 2017 el ritmo de crecimiento del año anterior", pero con una importante moderación del Producto Interior Bruto (PIB). Está previsto que acabe el ejercicio alrededor del 3,1% -como cerró el tercer trimestre- y que el próximo avance un 2,5%, "aunque con un diferencial favorable respecto al conjunto de España". Los expertos le dan la razón. La mayoría de gabinetes económicos y centros de predicción colocan a la comunidad entre las más fuertes del nuevo año, aunque hay unanimidad también en que el empleo se resiste a dar el mismo estirón y Galicia se quedará con el peor dato de paro de todo el noroeste, una zona del país tradicionalmente más tranquila para el mercado laboral.
¿En qué se basa el Ejecutivo autonómico para hacer sus cálculos? Primero, que el consumo interno será mayor (1,5%). No tanto porque de repente las familias le vayan a poner más alegría al bolsillo, sino porque en este 2017 el gasto está más contenido "por la pérdida de factores que ayudaron al crecimiento en años anteriores", dice, en referencia a la rebaja fiscal y la caída de los precios. Hasta octubre, la vida se encareció en la comunidad un 1,5%. La subida de sueldos podría ayudar ante la merma de la capacidad adquisitiva. La propia Xunta admite, sin embargo, que solo compensaría "en parte" y, además, está condicionado a que realmente sea así, que mejoren los salarios.
Sí parece más convencida de la fuerza del desembolso de las empresas, un 4% de ascenso. "La inversión en bienes de equipo mantendrá una tendencia al alza, favorecida por el dinamismo de la industria manufacturera, por las condiciones financieras favorables y las menores necesidades de desapalancamiento financiero", señala. A la compra de vivienda le tocará esperar. Se recupera, pero de forma "lenta", apunta la memoria de Facenda con las cuentas regionales del próximo año, "favorecida por el crecimiento del empleo y la disponibilidad de financiación".
Tanto exportaciones como importaciones aumentarán. Las ventas al exterior "acelerarán su crecimiento (5,7%) debido a la mejora del sector industrial y la evolución favorable de los países de nuestro entorno". Las compras lo harán también, más incluso que este año (4,6%), por "el mayor dinamismo del sector industrial gallego".
Con esta fotografía, la Xunta coloca la tasa de paro de la comunidad "ligeramente por encima del 14%". El 14,2%. La creación de empleo se moverá "en niveles próximos al 2%".
"Las comunidades autónomas donde la actividad creció con más intensidad en el conjunto de los tres primeros trimestres, en comparación con el mismo periodo del años pasado, fueron Madrid, Canarias, Baleares, Cataluña y Galicia", asegura la Fundación de Cajas de Ahorros (Funcas) en su nuevo panel de previsiones publicado esta semana. A diferencia del resto, el caso de Galicia es peculiar. No tira adelante por el turismo y la construcción. Sus locomotoras, subrayan los expertos de Funcas, son la industria y las exportaciones. Por esas razones, la comunidad volverá a ocupar en 2018 los puestos altos del avance regional: frente al crecimiento del 2,6% marcado para el PIB estatal, el gallego remontará otro 3%. Solo Madrid crecerá más, un 3,3%. Funcas es, por tanto, más optimista que la Xunta.
El informe advierte, como otros muchos, de los riesgos que vienen desde Cataluña. "La inseguridad que genera dicha situación afecta negativamente a la economía, fundamentalmente a la catalana, a través de la paralización, ya sea temporal o definitiva, de planes de consumo, de inversión y de contratación de nuevos empleados", sostiene el documento firmado por el Departamento de Coyuntura y Economía Internacional de Funcas. El peso del negocio internacional permite a Galicia alejar parte de los fantasmas locales y "la pérdida de dinamismo de la demanda nacional", que estará "ralentizada".
La "persistencia" de las grandes diferencias territoriales del empleo "representa uno de los principales desafíos a la cohesión territorial del país". A juicio de los expertos de Funcas, únicamente cuatro regiones dejarán la tasa de paro por debajo del 10%: Baleares (8,7%), navarra (8,4%), País Vasco (9,4%) y La Rioja (8,2%). En España se situará en el 15,1%. También en este caso el informe coincide con las previsiones de la Xunta: el nivel de desempleo en Galicia será inferior a la media, un 13,1%, lo que convertirá a la autonomía en la que tenga más paro de todo el noroeste del país.
La cara de la economía gallega en 2015 será la exposición a la demanda externa y la cruz la "mayor debilidad relativa" en el gasto de los hogares, concluye BBVA Research en su última revisión de los pronósticos regionales. A mediados de año apuntó un alza del PIB autonómico del 2,9% en 2018. Ahora rebaja el crecimiento de Galicia al 2,6%. De nuevo, más que la media (2,5%), en línea con los números de San Caetano, aunque lejos del grupo de cabeza: Baleares (3%), País Vasco (2,9%) y Canarias (2,9%). La tasa de paro, según el gabinete de estudios del banco, se quedará en la región en el 14,5%, apenas cuatro décimas menos que el desempleo estatal. Y, otra vez, la cifra más alta del noroeste.
La red de investigadores económicos Hispalink pone de nuevo el optimismo a la economía de Galicia el próximo año, cuando da por hecho que avanzará un 2,8% y se sume a los territorios de más fuerza. Repiten Baleares (3,5%), Madrid (3,1%) y Canarias (2,8%).
De todos los sectores, la construcción liderará en Galicia el incremento, un 3,5%, aunque la industria registrará un ascenso superior al 2% y los servicios rozarán el 3%.
