La plantilla de Maderas Iglesias participó ayer en una manifestación por el centro de Vigo para reclamar el pago de sus salarios y la puesta en marcha de medidas que garanticen la continuidad de la compañía. De los 800 empleados que llegó a tener, en la actualidad solo quedan 250 y algunos, según los sindicatos, acumulan ya hasta 400 días en expedientes de regulación de empleo.