El fabricante de automóviles alemán se encuentra en conversaciones con la firma china Great Wall para poner en marcha una joint venture con la que comercializar los modelos de Mini en el país más poblado del mundo. Según la agencia Bloomberg, los planes de BMW podrían incluso ir más allá y se especula con la posibilidad de que sobre la compañía que surja de esta alianza recaiga la producción de los Minis que luego se exporten al resto del mundo, en detrimento de sus centros de producción de Holanda y Reino Unido.