El Banco Santander compra el Banco Popular por solo un euro. El Santander ha realizado dicha operación como resultado de un proceso competitivo de venta organizado en el marco de un esquema de resolución adoptado por la junta única de resolución y ejecutado por el FROB, según ha explicado a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). La operación se ha confirmado esta misma mañana y evita la caída de la entidad bancaria con fuertes vínculos en Galicia.

La compra del Banco Popular se produce después de que la entidad, cuyas cuentas están muy lastradas por los activos inmobiliarios, perdiera en bolsa más del 50 % de su valor en los últimos días y "sufriera un deterioro significativo en su posición de liquidez", según explica el BCE.

El Santander, por su parte, ampliará capital por aproximadamente 7.000 millones de euros que cubrirá capital y las provisiones requeridas para reforzar el balance de la entidad presidida por Emilio Saracho. "Como parte de la ejecución del mencionado dispositivo de resolución se ha producido la amortización íntegra de la totalidad de las acciones de Banco Popular en circulación al cierre de ayer y de las acciones resultantes de la conversión de los instrumentos de capital regulatorio Additional Tier 1 emitidos por Popular y la conversión de la totalidad de los instrumentos de capital regulatorio Tier 2 emitidos por Popular en acciones de la entidad de nueva emisión, todas las cuales han sido adquiridas por Banco Santander por un precio de un euro", ha explicado la entidad presidida por Ana Botín.

Como parte de la ejecución del mencionado dispositivo de resolución, explica la nota, se han amortizado íntegramente las acciones del Banco Popular que había en circulación al cierre de ayer, así como las acciones resultantes de la conversión de los instrumentos de capital regulatorio emitidos por el Popular

Luis de Guindos: "Es una buena salida para el Banco Popular"

La decisión anunciada por las autoridades europeas en relación al Banco Popular, que supone su venta a Banco Santander, "es una buena salida para la entidad" dada la situación a la que había llegado en las últimas semanas, según ha indicado el ministro de Economía, Industria y Competitividad, Luis de Guindos, destacando que implica la máxima protección a los depositantes.

"Es una buena salida para la entidad, dada la situación a la que había llegado en las últimas semanas, ya que implica la máxima protección a los depositantes y la continuidad de la actividad", ha declarado el ministro. En este sentido, el ministro ha señalado que la decisión anunciada por las autoridades europeas en relación al Banco Popular se ha adoptado de acuerdo con el nuevo marco sobre resolución bancaria y en cumplimiento estricto de la normativa comunitaria.

De este modo, Guindos ha subrayado que la operación se lleva a cabo sin la utilización de recursos públicos y sin que se produzca, por tanto, un eventual contagio entre riesgo soberano y bancario, como ocurrió en épocas pasadas.

De hecho, el ministro considera que la situación actual "es muy diferente a la del año 2012", dada la buena salud del conjunto del sector financiero y de la economía española en general, por lo que se dan así "las mejores circunstancias para aportar las soluciones más adecuadas y eficaces bajo la autoridad europea, con el objetivo final de preservar la estabilidad del sistema financiero".

Banco Popular: crónica de una muerte anunciada

El Banco Popular comenzó su declive el 26 de mayo de 2016, cuando anunció por sorpresa una ampliación de capital de 2.500 millones de euros con la que preveía mejorar su solvencia y rentabilidad y fortalecer su balance. La operación iba acompañada de un plan estratégico con el que quería liberarse, antes de 2018, de 15.000 millones de euros en activos improductivos, su gran talón de aquiles.

Pese a que la gran mayoría de accionistas acudió a la operación, los mismos registraron fuertes pérdidas, ya que los títulos del Popular cerraron 2016 con una depreciación bursátil de casi el 66 %. Una importante reducción de su valor que continuó a principios de 2017, arrastrado por las dudas que generaba su futuro.

Desde que esta mañana se ha conocido el anuncio de la compra del Banco Popular, las acciones del Banco Santander se han desplomado en Bolsa. El Ibex 35 ha abierto la sesión de este miércoles con una caída del 0,92%, lo que ha llevado al selectivo a situarse en los 10.779,9 enteros a las 9.01 horas