Banco Santander se encuentra ultimando una inminente ampliación de capital con el objetivo de financiar la absorción de Banco Popular, indicaron a Europa Press en fuentes del mercado. Según la agencia norteamericana Bloomberg, que adelanta la información, la operación ascendería a 5.000 millones de euros que la entidad destinaría a impulsar sus niveles de capital, aunque precisa que el banco presidido por Ana Botín aún no ha tomado una decisión en firme.

Fuentes de Santander consultadas eludieron hacer comentarios al respecto de la ampliación de capital, mientras que desde Popular indicaron que están a la espera de conocer información al respecto y ver cómo evoluciona el desarrollo de los acontecimientos para poder pronunciarse al respecto.

La posible operación corporativa con Banco Santander podría haber sido una de las causas que han obligado al presidente de Banco Popular, Emilio Saracho, a ausentarse de una reunión con representantes del Banco Central Europeo ayer.

El Popular, el sexto mayor de España, prosiguió su tortuosa trayectoria bursátil con una caída adicional del 6,21% en la jornada de ayer, que, aunque más suave que las de días precedentes, supuso que la entidad liderara una jornada más los descensos en el índice selectivo Ibex 35 y que en el mercado continuo sólo fuese rebasado por OHL, que cedió el 6,78%.

Tras la depreciación (que llegó a acumular un descenso del 11,2% en el peor momento de la jornada), la acción del banco se situó en 0,317 euros, con lo que el Popular apenas vale 1.330,4 millones, la mitad que hace una semana. Hace un decenio llegó a valer 20.000 millones. Las agencias de calificación de riesgos Moody's (por segunda vez desde abril) y DBRS rebajaron los "rating" del banco y los dejaron en perspectiva negativa.

Todo esto suma zozobras a un mercado muy nervioso sobre el futuro del que en los años 80 y 90 llegó a ser uno de los bancos más rentables del mundo. La alta dirección de la entidad mantuvo ayer una reunión (en principio, ordinaria) con responsables del Banco Central Europeo que no fue confirmada por las partes y de la que nada trascendió.

El Popular sigue barajando las opciones de otra macroampliación de capital (ya hizo tres por 5.455 millones), la venta de activos (se depreció del 51% en Targobank y, según Europa Press, ha encomendado a KPMG que le venda inmuebles por 2.000 millones) y dejarse engullir por un competidor. Las alternativas serían la "recapitalización preventiva" europea (como acaba de hacerse con Banca Monte dei Paschi di Siena) o ser intervenido.

Por otra parte, el gobernador del Banco de España, Luis María Linde, rechazó ayer pronunciarse en el Senado sobre la actual situación del banco. "No puedo decir nada de eso, así de sencillo. No es el momento ni vengo preparado para eso", respondió Linde al ser preguntado por un senador sobre la situación del Popular durante su comparecencia en la Comisión de Presupuestos.