El ministro de Energía, Turismo y Agenda Digital, Álvaro Nadal, reconoció ayer que la factura de electricidad sería un tercio más barata si la instalación de las renovables en España se hubiese hecho de forma "más pausada".

En concreto, precisó que si los 30.000 megavatios (MW) instalados en España de energía renovable se hubieran implantado "de manera más pausada, con menos impulso político, con menos deseo y más realismo", en vez de "siete mil millones de euros en primas que pagamos todos los años por 25 años, estaríamos pagando como mucho 300 o 400 y tendríamos una factura de la luz un tercio más barata de lo que ahora mismo estamos pagando".

La factura eléctrica sufraga cada año unos costes totales superiores a los 30.000 millones de euros, de los que alrededor de 17.000 millones corresponden a costes regulados, entre los que se incluyen los incentivos a las renovables, mientras que el resto procede del coste de la energía en el mercado mayorista.

El ministro criticó además que, "en la transición energética" que vive España, "muchas veces se pone por delante la ideología o los buenos deseos", cuando hay que "trabajar sobre realidades y costes".