El juez José de la Mata ha rechazado la petición del fiscal de volver a prorrogar la fase de instrucción del llamado "caso Pescanova", aunque ha concedido fijar un plazo adicional de cuatro meses para finalizar las diligencias pendientes. En el auto, al que ha tenido acceso hoy Efe, el magistrado indica que la causa arrancó hace cuatro años, "lo que excede los plazos de investigación razonables que establece la ley", y además se encuentra ya "prácticamente finalizada".

Las diligencias pendientes hacen referencia a la reciente petición por parte del fiscal de una nueva comisión rogatoria a Andorra para averiguar el origen de una transferencia de 150.000 euros realizada desde la sociedad panameña Reflex Portfolio a la cuenta de uno de los hijos del expresidente de Pescanova, Manuel Fernández de Sousa, en el banco Andbank.

El juez ya decidió imputar a la mujer y a dos de los hijos de Fernández de Sousa por un presunto delito de blanqueo de capitales o alzamiento de bienes a través de Andorra en el marco de este mismo caso, que investiga desde 2013 la actuación del que era su presidente en el descalabro sufrido por Pescanova debido a las numerosas irregularidades contables detectadas.

En el auto de hoy, De la Mata recuerda que la instrucción se ha prolongado en el tiempo debido a las peticiones de cooperación judicial enviadas a otros países. El magistrado optó por prorrogar en junio de 2016 esta fase durante un año más al declarar el caso como de "especial complejidad", plazo que expiraba justo hoy.