La industria gallega del sector naval inició ayer la ronda de contactos con armadoras en la feria Nor-Shipping 2017, que se celebra en Oslo. En un mercado tan competitivo y proteccionista como el noruego, las firmas viguesas intentan hacerse un hueco. Sin embargo las más de treinta firmas de la comunidad que se desplazaron al país nórdico se están viendo afectadas todavía por el bajo precio del petróleo. "El precio provoca que el mercado esté más parado de lo previsto. Necesitan que se sitúe al menos en 60-65 euros el barril para que hubiera una reactivación del mercado noruego", explica Enrique Mallón, secretario general de la Asociación de Industrias Metalúrgicas de Galicia, Asime.

Y es que ayer mismo el precio del barril vivió una jornada de ventas con caídas ante el temor de un exceso de oferta de crudo a nivel global. Pese a la reunión de ayer entre el ministro de energía de Arabia Saudí, Khalid al-Falih y su homólogo ruso Alexander Novak -que aseguraron que están "comprometidos" con el objetivo de reducir los inventarios mundiales-, el barril de petróleo Brent (de referencia en Europa) para entrega en julio cerró en el mercado de futuros de Londres en 50,29 dólares (44,77 euros), un 2,98% menos que al término de la sesión anterior. Mientras, el precio del petróleo intermedio de Texas (WTI) cayó un 2,7% y cerró en 48,32 dólares (43,01 euros) el barril.

Estos entornos de los 50 euros hace que el sector petrolero no invierta tanto como lo hizo en los años previos, lo que dejó buenos contratos para el naval vigués que ahora se ven suplantados por la pesca.

Precisamente para este último sector, hay empresas que intentar vender sus equipos, como es el caso de las viguesas Industrias Ferri o Ibercisa "Pero no es sencillo entrar, es un mercado con proteccionismo en el que se valora mucho el mercado local. Eso sí, una vez entras, te fortaleces mucho y te posicionas bien", explicó Mallón.

Según el responsable de los metalúrgicos gallegos, Galicia está "mostrando una buena imagen" al acudir "de manera agrupada". "Ya se han celebrado reuniones con astilleros como el alemán Meyer, el holandés Damen o Vard, propiedad de la empresa italiana Fincantieri", indicó Mallón.

Mientras, los astilleros gallegos que se desplazaron a la zona se afanan con mantener reuniones con los armadores que se encuentran en la feria. Sobre todo en el terreno pesquero, puesto que al igual que en Galicia en el norte de Europa también se encuentran en plena renovación de la flota pesquera. "Aunque es complicado porque hay que competir con astilleros noruegos", explicó Mallón, que además recuerda que "la carga de trabajo actual en Galicia dificulta lograr contratos".

Cabe recordar que astilleros como Nodosa (presente en la feria) o Armón tienen firmados barcos para el norte europeo, como son dos arrastreros para un grupo germano y un oceanográfico para Suecia, respectivamente.