La Audiencia Provincial de Pontevedra ha fallado en contra de Nueva Pescanova, sociedad que heredó el negocio de la pesquera fundada en 1960, que denunció las "ventajas" que la antigua matriz (Pescanova SA) se reservó con la segregación de los activos y pasivos en favor de la primera. De este modo la multinacional deberá continuar transfiriendo al año 255.000 euros a la SA, además de prestar gratuitamente servicios legales y administrativos (por un máximo anual de 200.000 euros). Asimismo, la vieja Pescanova tendrá derecho a continuar con un representante en el consejo de administración aunque ahora solo posea el 1,7% de las acciones del holding.

El fallo, que cuenta con el voto particular en contra del magistrado Jacinto José Pérez Benítez, condena a costas a la parte apelante. "Debe considerarse [...] el mantenimiento de cierto apoyo administrativo, fiscal y legal, pues en la situación en que quedan las sociedades participantes no puede verse como una situación totalmente independiente", dice el fallo, que añade que los acuerdos "tienen sentido".

Las diferencias entre Pescanova SA y Nueva Pescanova han sido continuas desde que la segunda asumió el negocio después de un complejo proceso concursal. El de inicio administrador único del holding, Jacobo González-Robatto, acusó al consejo de la antigua matriz de haber incumplido los objetivos del plan de negocio, con un Ebitda que se redujo a la mitad de lo inicialmente estimado (34 millones de euros en 2015). Pescanova SA fue invitada a participar en la ampliación de capital del grupo pesquero, aunque rechazó la oferta y anunció que impugnará la junta en la que se consumó la operación.