La dirección del centro de Vigo de la multinacional automovilística francesa Grupo PSA está estudiando aumentar la cadencia de producción de una de sus líneas ante un repunte de los pedidos, según indicaron fuentes sindicales. Esta subida, de un vehículo por hora, afectaría solo al Sistema 1 (furgonetas y sedanes), el más saturado de la planta, por lo que la medida, que será abordada el próximo lunes por los responsables de la empresa con el comité, ya ha generado críticas por el impacto extra sobre los altos ritmos de trabajo que sufren los operarios de esta línea.
La razón de este posible aumento de cadencia es una alza -todavía por concretar- de la demanda de vehículos comerciales ligeros (furgonetas) para los meses de verano y otoño. Los cambios se harían efectivos el próximo 1 de junio, pero antes se está realizando un estudio técnico de la línea y sobre los medios para poder afrontarlo. Según los sindicatos, serían necesarias algunas inversiones para poder acelerar el ritmo de montaje. Actualmente, el centro de Balaídos produce 456 coches por turno, 56,8 a la hora, aproximadamente.
La medida no ha gustado a las secciones sindicales del centro, que aseguran que este sistema está al máximo de capacidad y que los ritmos de trabajo ya son demasiados elevados. PSA-Vigo había estimado una horquilla de producción para este año de entre 335.000 y 385.000 coches, aunque las previsiones a día de hoy son algo más optimistas, según ha podido saber FARO. Al menos para el Sistema 1, en el que se ensamblan las furgonetas y los sedanes. El Sistema 2 (monovolúmenes), por contra, está sufriendo la menor aceptación en el mercado de sus modelos.
Esta línea será sin embargo en la que a partir del tercer trimestre del año empiecen a rodar las primeras unidades de la próxima generación de furgonetas de PSA y Opel, el proyecto K9, aprovechando las ventajas en cuanto a peso y costes que ofrece la plataforma modular eficiente EMP2 del grupo.
Coches eléctricos
La Asociación Española de Fabricantes de Automóviles y Camiones (Anfac) ha solicitado a la Comisión Europea que impulse en el territorio comunitario una supresión o una significativa reducción del IVA para los coches eléctricos, con el fin de impulsar esta tecnología que tiene un menor impacto sobre el medio ambiente. Lo aseguró ayer el consejero director general de Nissan Iberia, Marco Toro, en el marco de la vigente edición del Salón del Automóvil de Barcelona.
