La línea de alta tensión que conecta Galicia con Asturias vuelve a estar operativa después de tres meses de desconexión debido a los daños causados por el temporal de principios de febrero. Red Eléctrica de España (REE) ha tenido que sustituir diez torres de la línea Boimente-Pesoz que habían sido derribadas por el viento.

REE, operador del sistema eléctrico español, puso en servicio la primera conexión de alta tensión entre Asturias y Galicia a finales de 2016, después de tres años de trabajos y una inversión de cerca de 70 millones de euros. Cuando la línea llevaba poco más de dos meses en funcionamiento, un temporal de viento derribó diez torres en la municipio de Lourenzá, en Lugo, y obligó a interrumpir el servicio de la línea Boimente-Pesoz el pasado 3 de febrero.

Fuentes de Red Eléctrica señalaron ayer que "se han sustituido completamente los diez apoyos" dañados y que se ha incrementado en un 32,5% el mínimo de resistencia que fija el reglamento para las condiciones más desfavorables. El servicio de transporte eléctrico de la línea Boimente-Pesoz de 400kV quedó totalmente restablecido el pasado 27 de abril. Mientras que estuvo interrumpido se utilizaron circuitos alternativos. Las nuevas torres fueron edificadas con más resistencia para evitar que se vuelvan a doblar por el viento.