Pablo Mansilla, director técnico del proyecto, indicaba ayer ante los medios informativos mientras la estructura se alzaba que "el riesgo de problemas existe" pero que han "trabajado mucho para que no sucedan". Sin embargo, el retraso provocado por los actos institucionales antes de la botadura coincidió con una bajada de la marea con la que no contaban, lo que hizo que la plataforma de Magallanes tocase el fondo de la zona de terminal de cruceros ligeramente y escorase todavía sujetada por las grúas.

"No ha sido nada grave", comentaba Mansilla a media tarde, que tan solo informó que continuarían con la maniobra (suspendida pasadas las 14.00 horas) cuando la marea volviera a subir.

Al cierre de esta edición las grúas seguían en su sitio y desde la empresa no concretaron si el artefacto estaba ya en el agua o tendrían que esperar a la pleamar de hoy.