Pescanova Sociedad Anónima (o vieja Pescanova) ha informado a su heredera, Nueva Pescanova, de que no aceptará la invitación para acudir a la ampliación de capital, tras la cual podría alcanzar el 3,6% del accionariado. Este lunes expiraba el plazo concedido a la SA para notificar la decisión aunque, según fuentes de la antigua matriz, el mensaje se emitió el jueves 23, un día después de la asamblea celebrada en Redondela. De este modo, y según sus propios cálculos, apenas podrá retener el 1,6% del capital en la multinacional que preside Jacobo González-Robatto.

La estrategia de la vieja Pescanova pasa por abortar la ampliación de capital con la anulación judicial de dos decisiones contables que, a su juicio, minaron la salud financiera de la pesquera. La primera, la activación de un crédito de 125 millones (el supersenior) tras la que el grupo contrajo una deuda adicional de 300 millones; la segunda, el deterioro del valor de los activos en 151 millones en las cuentas de 2015. Si un juez accediese a revertir cualquiera de ellas, opinan, la capitalización de en torno a 350 millones de euros de deuda sería innecesaria.

Desde el entorno de la Sociedad Anónima aseguran a FARO que, de momento, no se ha dado ningún paso para llevar a Nueva Pescanova a los tribunales, aspecto que sí podría debatirse en el consejo convocado para mañana jueves en Madrid. Además deberán nombrar a las dos personas que vayan a representar a la vieja matriz en Nueva Pescanova, cargo que antes ostentaban Alejandro Legarda y Fernando Herce. Los candidatos son los cinco consejeros actuales de Pescanova SA, ninguno de los cuales posee acciones de la empresa, como han reconocido a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV): los hermanos Alejandro y Leopoldo Fernández Zugazabeitia, Juan Manuel Ginzo, Luis Malo de Molina y Luis Martín. Este último es el representante del fondo Broadbill, máximo accionista con el 11,5% y que podría sumar un 2,5% adicional en las próximas horas. Los demás tienen todos la categoría de "independientes".

Vuelta a la negociación

En lo que concierne a la multinacional esta tarde arrancan formalmente las negociaciones con la mediación de Inspección de Traballo a fin de que acercar posturas para un nuevo convenio. El pasado viernes se conformaron las mesas (de un lado la empresa con CIG, UGT, CUT y USO; de otro, con Comisiones aparte) y se retiraron las medidas de presión por ambas partes. Las organizaciones sindicales suspendieron la convocatoria de huelga indefinida, que arrancaría el 3 de abril en caso de no llegar a acuerdo, y Nueva Pescanova retiró la amenaza de implantar de forma unilateral el convenio estatal de elaborados. Estas fueron las condiciones del mediador, José Antonio Casas de Ron, para interceder en el conflicto tras casi un año de negociaciones.

La compañía defendió el pasado viernes su propuesta como única vía para negociar, aunque no ha trascendido si hoy formulará cambios en la misma para tratar de alcanzar un acuerdo. Los sindicatos, por su parte, rechazan la doble escala salarial propuesta, la subida salarial (del 1% hasta 2020) o el cuarto turno, en el que trabajarán los recién contratados y que implicará acudir a la factoría en fines de semana.