El calendario de movilizaciones en Nueva Pescanova solo tenía escritas dos fechas: 14 y 21 de marzo (ayer). Más allá de eso solo existía la esperanza -al menos entre algunos sindicatos y trabajadores- de que la compañía suavizaría su propuesta de convenio y los llamaría a negociar otra vez. Pero la pesquera paró ayer de nuevo la producción en Chapela y Porriño sin que se hubiese producido un acercamiento entre las partes. La social, con los sindicatos CIG, UGT, CUT y USO al frente, habla ya de marcar en serio el 3 de abril como el inicio de una huelga indefinida. "Sabemos que esta lucha va a ser larga", dijo la presidenta del comité de la antigua Frivipesca (Chapela), Candelaria Laly Martínez. "El sábado es importante acudir a la asamblea", arengó al término de la manifestación por el centro de Vigo.

Cientos de personas (400, según datos de la Policía Local) acudieron a la marcha para defender su actual convenio y dar "visibilidad" al conflicto en la ciudad. Fue el colofón de una segunda jornada de huelga que, como la primera, fue secundada por la práctica mayoría de los empleados de las desaparecidas Frivipesca, Pescanova Alimentación, Frigodis y Frinova. En la asamblea a la que se refirió la portavoz de los comités se pulsará hasta qué punto está dispuesta la plantilla del grupo a elevar la presión, máxime cuando la dirección ha advertido de que podría implantar el convenio estatal de elaborados a partir del 31 de marzo de forma automática. Este acuerdo, de aplicación en muchas de las competidoras de Nueva Pescanova, ofrece salarios de partida hasta un 40% inferiores, sin antigüedad o ascensos.

La nota discordante de una jornada tranquila se produjo a primera hora de la mañana en Chapela, donde varios trabajadores hacían de piquetes para evitar la entrada de empleados a las fábricas. Un trabajador, Luis Bar, fue arrestado por la Policía Nacional acusado de lesiones, resistencia y desobediencia a la autoridad. Resultaron heridos tanto él como un efectivo policial. Testigos del suceso aseguran que fue un golpe fortuito producido por un resbalón, tras el que Bar habría tirado al suelo a dos agentes. Fue liberado a mediodía y está a la esera de pasar a disposición judicial.