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El ranking que elabora la Comisión Europea

Galicia, en el tercio de las regiones menos competitivas de la UE

Figura en el puesto 181 de los 263 territorios, lastrado por las infraestructuras y el mercado laboral

Galicia, en el tercio de las regiones menos competitivas de la UE

En términos de competitividad económica, Galicia está más cerca de la depauperada región rumana de Sud-Est que de la pujante Londres. La Comisión Europa publicó ayer el índice de competitividad regional de la UE correspondiente a 2016, en el que Londres y Sud-Est marcan el máximo y el mínimo continental, con 100 y 0,07 puntos respectivamente, en una escala de 0 a 100. Galicia obtiene 36,7 puntos, lo que la sitúa en el puesto 181.º de las 263 regiones europeas, en el tercio de los territorios menos competitivos. Ninguna región española está entre las 80 más competitivas. La primera, Madrid, ocupa el puesto 83.º. Le siguen País Vasco (119.º), Navarra (148.º), Cataluña (153.º), Cantabria (164.º) o Aragón (173.º). En el caso gallego la posición en este ranking es peor que la que ocupa la comunidad, por ejemplo, en Producto Interior Bruto (PIB) per cápita: 167.º.

Bruselas define la competitividad regional "como la habilidad de una región para ofrecer un entorno sostenible y atractivo para las empresas y para que los residentes vivan y trabajen". La Comisión hizo su primer ranking en 2010 y lo repite cada tres años. Galicia apenas ha variado su puntuación en los tres informes. Con respecto al de 2013 la comunidad ha avanzado un puesto, pero solo a causa de las caídas de otras regiones en la misma clasificación. Perdieron puestos La Rioja (empata con Valencia en el 184.º) y Murcia (210.º).

Los técnicos usan once grandes factores para evaluar las fortalezas y debilidades de una región. Los clasifican en tres categorías: básicos, de eficiencia y de innovación. Dentro de los básicos se analizan y puntúan las instituciones, la estabilidad macroeconómica, las infraestructuras, la salud y la educación. En este apartado de básicos Galicia obtiene 51,8 puntos, lo que la sitúa en el puesto 181 de las 263 regiones. Galicia obtiene su mayor puntuación en salud (figura en el puesto 86) y la peor en infraestructuras (puesto 200). En el segundo apartado, el de eficiencia, se evalúa la educación superior y la formación continua, la eficiencia del mercado laboral y el tamaño del mercado. En eficiencia Galicia obtiene una puntuación de 49.8 puntos, lo que la sitúa en el puesto 191. La comunidad obtiene su mejor puntuación en educación (puesto 176) y la peor en eficiencia del mercado laboral (puesto 194).

Y el tercer apartado es el correspondiente a innovación, donde se analiza la sofisticación de los negocios, la innovación y las capacidades tecnológicas, que mide la colaboración entre empresas, universidades y centros de investigación. En este apartado Galicia obtiene su puntuación más baja, con 34,7 puntos, pero curiosamente obtiene su mejor posición en el ranking, con el puesto 179.

En España, hay una diferencia notable entre las regiones de la mitad norte y las del sur. De hecho, las únicas comunidades autónomas españolas que están situadas entre las 50 regiones menos competitivas de la Unión Europea según el informe son Castilla-La Mancha (puesto 216 de 263), Andalucía (220) y Extremadura (230).

Las diferencias en el continente son abismales. El mapa por colores elaborado por la Comisión Europa (que acompaña a este texto) muestra que el centro, el núcleo duro de la UE, y los países del norte están muchísimo mejor que los del sur y el este. España, Grecia, Portugal, el sur de Italia, Bulgaria o Rumanía están claramente atrasadas en términos de competitividad, sin grandes cambios respecto a 2013. "Una vez más, se puede observar un patrón policéntrico, con capitales fuertes y áreas metropolitanas como impulsores de la competitividad", señala el informe de la Comisión Europea.

La inflación repite en el 3% y amenaza los salarios y la mejora de las exportaciones

  • El Índice de Precios de Consumo (IPC) bajó un 0,3% en febrero respecto al mes anterior y mantuvo su tasa interanual en el 3%, igualando el registro de enero, cuando los precios de la luz y de las gasolinas llevaron a la inflación a niveles de hace cuatro años y medio. El dato interanual refuerza el riesgo de pérdidas de poder adquisitivo de pensiones y salarios y también de retroceso en la mejora de la competitividad exterior que, por la vía de la baja inflación, obtuvo España frente al conjunto de la zona euro en los últimos años. En enero, la inflación española fue del 3%, frente un promedio del 1,8% en la región monetaria.Según el indicador adelantado publicado ayer por el Instituto Nacional de Estadística (INE), en el comportamiento de la tasa interanual del IPC de febrero ha destacado la bajada mensual de los precios de la electricidad.El IPC interanual arrancó el año en su tasa más alta desde octubre de 2012. En febrero se ha repetido el mismo porcentaje, lo que significa que la cesta de la compra se ha encarecido un 3% en el último año.

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