La actividad acuícola en Mozambique se inició a mediados de los años 50 con pequeños tanques artesanales en Nampula, Zambézia y Manica. Desde entonces esta industria apenas se ha desarrollado pese a que es una de las principales apuestas del Gobierno local, y la producción se limita a unas 1.000 toneladas de langostino, tilapia y carpa. La gobernadora de la provincia de Sofala (donde está la filial de Nueva Pescanova, Pescamar), Maria Helena Taipo, se reunió esta semana con el embajador español, Álvaro Alabart, a quien le trasladó la petición para que la firma gallega capitanee el despertar de la industria acuícola local.

En Mozambique apuestan por la cría de camarón, cuyas capturas en alta mar se limitarán este año a unas 3.000 toneladas (el 60% corresponderán a los 32 barcos de Pescamar). Solo hay tres empresas dedicadas actualmente a la cría de pescado en cautividad: Aquapesca, Sol & Mar e Indian Ocean Aquaculture. Pescanova había anunciado en 2008 grandes planes acuícolas en Mozambique pero nunca los ejecutó.