Todos los productos básicos de la cesta de la compra se encarecieron en el mes de octubre en Galicia, con las patatas, los huevos y la carne a la cabeza. Solo estos tres elevaron su precio un 1,5%, casi el doble del alza general del Índice de Precios al Consumo (IPC) en la comunidad, del 0,8% (una décima más que el indicador a nivel estatal, que se quedó en el 0,7% interanual). Las patatas y derivados fueron un 2,4% más caras en octubre que en septiembre, y en el último año acumula un encarecimiento superior al 13%. Es, con diferencia, el producto de gran consumo cuya compra se ha complicado más para los gallegos. Los huevos se han encarecido siete décimas desde octubre de 2015, pero en el último mes su precio se elevó un 1,3%. En cuanto a las carnes, todas cuestan más en el supermercado: vacuno (+1,3%), porcino (0,6%), ave (0,8%) y ovino (0,5%). El pan y el pescado hicieron lo propio con incrementos de tres y cuatro décimas, respectivamente.
Pero el alza de la inflación fue prácticamente generalizada, y mucho más acusada en Galicia en el último mes (+1,4%) en comparación con la del conjunto del país (+1,1). La gallega fue la comunidad donde más subieron los precios en octubre de toda España, con la misma tasa que Murcia, Extremadura, Castilla-La Mancha y Aragón. También en lo que concierne a los hogares, conceptos como la electricidad y la calefacción cotizaron al alza, con una subida mensual del 4,6%. En el conjunto del año, eso sí, y gracias en gran medida a que el precio del petróleo, este capítulo es todavía un 1,7% más económico para las familias. Tras haber dejado atrás la campaña de rebajas en el textil y con las nuevas colecciones de otoño invierno, tanto la ropa como el calzado se encarecieron entre un 6,3 y un 15,4%.
A nivel estatal la subida interanual del IPC en octubre se debe al aumento de los precios de los carburantes (gasoil y gasolina) y de la electricidad, frente al descenso que experimentaron en igual mes de 2015.
