El fabricante estadounidense de vehículos General Motors (GM) ha anunciado que suprimirá el tercer turno de trabajo en sus plantas estadounidenses de Lordstown (Ohio) y Lansing Grand River (Michigan), una medida que afectará a 2.084 trabajadores. GM explicó que esta decisión busca adecuar la demanda de los modelos que se ensamblan en dichas plantas a sus volúmenes de producción, en línea con el cambio de preferencias de los consumidores hacia crossovers y todoterrenos, una tendencia que está previsto que se mantenga.

La compañía prevé finalizar el tercer turno de trabajo en el centro de Lansing Grand River el 16 de enero de 2017, en el que se fabrican los Cadillac ATS y CTS y el Chevrolet Camaro. Esta decisión afectará a 839 trabajadores, sobre una plantilla total de 2.700 personas.

Por su parte, la corporación cerrará el próximo 23 de enero el tercer turno en Lordstown, con un impacto sobre el empleo de 1.245 personas. La plantilla actual de la factoría, que fabrica el Chevrolet Cruze, se sitúa en 4.500 personas.

La corporación confirmó que invertirá 847,7 millones de euros en sus factorías de Toleo (Ohio), Lansing Grand River (Michigan) y Bedford Casting (Indiana), con el fin de adaptar las instalaciones para futuros programas de producción.