La agencia de calificación Standard and Poor's ha mantenido la nota de solvencia de España en un aprobado alto (BBB+) con perspectiva estable, dado que prevé que continúe la recuperación económica y la progresiva reducción del déficit público a pesar de la incertidumbre política. "Suponemos que habrá una continuidad en términos generales en las políticas del próximo Gobierno y que la evolución de la situación política en Cataluña no debilitará la confianza del inversor", dice.