La crisis económica y la mala gestión han forzado el cierre de un total de 529 astilleros en todo el mundo desde 2009, según el último informe elaborado por la firma especializada Clarkson Research. El estudio recoge que en 2009 había 931 factorías navales operativas y que a principios de septiembre solo quedaban 402. El principal país afectado por la quiebra de astilleros ha sido precisamente China, el líder mundial en construcción naval. En España, la caída de los pedidos a consecuencia de la crisis financiera y de los tráficos mundiales, y también por el bloqueo derivado de la suspensión del antiguo tax lease, se llevaron por delante al menos cinco factorías como Unión Naval de Valencia, Factorías Juliana, MCíes, Astilleros de Sevilla, Astilleros de Huelva y Unión Naval de Barcelona, lo que provocó la destrucción de más de miles de empleos (más de 8.000 solo en las rías de Pontevedra y Vigo) y el cierre de decenas de empresas auxiliares.