La Comisión Europea anunció ayer una actualización en la normativa sobre aduanas que dota a la Oficina Europea de Lucha contra el Fraude (OLAF) de mayores competencias. En concreto, las autoridades comunitarias tendrán acceso a nuevos sistemas informáticos que pueden registrar los movimientos de contenedores transportados en barcos y recopilar información de los bienes que acceden, transitan o abandonan la UE.