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La factoría de Vieira Argentina se queda sin "stock" debido a una huelga municipal

Los piquetes evitan la llegada de langostino a tres plantas de Puerto Deseado

Puerto Deseado es la localidad argentina donde están asentadas las filiales de Pescanova (Argenova), Profand (Pesquera Deseado) y Vieirasa (Vieira Argentina). Es el mayor puerto pesquero al sur del país, con gran actividad de buques poteros y tangoneros, pero en las últimas semanas gran parte de las descargas se han trasladado a Puerto Madryn y Mar del Plata por los disturbios ocasionados con motivo de una huelga de trabajadores municipales. Los piquetes paralizaron la entrada de langostino fresco a las plantas de procesado, que se quedan sin stock para continuar con la actividad normal. Una de las afectadas es la de Vieirasa, como confirmaron a FARO su presidente, Eduardo Vieira, y un empresario local. Las otras dos son Pespasa y Pesquera Veraz, de capital local.

El conflicto afecta a las procesadoras de gambón fresco, de ahí que las filiales de Pescanova o Profand no se hayan visto afectadas "por el momento", apuntan desde el sector. La campaña de langostino está en marcha y con buenas cifras de capturas -hasta junio habían subido casi un 20% respecto al año pasado-, aunque precios más bajos. "Los fresqueros están operando más al norte y les conviene descargar y traer la materia prima en camiones, pero ahora con el corte de ruta las plantas están paradas sin procesar", explicó Víctor Aguilar, representante del Sindicato Trabajadores de Industrias de la Alimentación (STIA) al diario local Mar y Pesca.

Un escenario complejo

La conflictividad laboral en Puerto Deseado no es nueva. Los empleados piden ahora un aumento de salario y los disturbios han generado un cruce de acusaciones entre los líderes políticos (Alicia Kirchner, hermana de la expresidenta del país, es la gobernadora de la provincia de Santa Cruz). Hace justo nueve años una huelga promovida por el ndicato de Obreros Marítimos Unidos (SOMU) llegó a plantar fuego en varias factorías pesqueras deseadenses, y la patronal cifró las pérdidas en cien millones de dólares. Los ataques habían afectado otra vez a la factoría de Vieirasa, así como a las de Pesquera Santa Elena (en quiebra), Pespasa, Carsa, Pesquera Santa Cruz, Arbumasa (del grupo Amasúa) y Pescargen.

El líder hasta hace poco más de un año del Somu, Omar Caballo Suárez, ha sido acusado formalmente de extorsión a las empresas tuvo que abandonar la cúpula de la organización tras 27 años en el cargo. Es un conocido kirchnerista, y la expresidenta del país llegó a reconocer públicamente que era su "gremialista preferido".

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