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La competitividad de la automoción

La fábrica de MGI en Vigo, con 300 empleados, frena su marcha a Portugal al lograr terrenos en Mos

La planta viguesa, con unos 300 trabajadores, no tiene capacidad para ganar superficie - La alcaldesa mosense le propone la ubicación que ocupaba la antigua Forbo

La fábrica de MGI en Vigo, con 300 empleados, frena su marcha a Portugal al lograr terrenos en Mos

La planta que el fabricante francés de componentes de automoción MGI Coutier tiene en Vigo ha paralizado su traslado a Portugal -donde ya cuenta con una instalación- al conseguir 16.000 metros cuadrados de terreno en Mos para poder reforzar su actividad industrial y mantener el empleo en el área de Vigo. El centro de O Caramuxo, en el que trabajan algo más de 300 personas, necesita ganar tamaño para hacer frente al futuro crecimiento de la demanda de sus productos y en el parque urbano vigués no tiene margen para ampliar instalaciones, situación ante la que el municipio mosense se ha postulado como alternativa.

La alcaldesa de Mos, Nidia Arévalo, puso a disposición de MGI Coutier los terrenos que ocupaba HB Fuller (la antigua Forbo, hoy sin actividad), de titularidad municipal y en régimen de concesión, para que el grupo galo traslade allí su producción. Pese a que la actividad de Forbo concluyó, la regidora pidió a la empresa que mantuviese la seguridad y el mantenimiento de las instalaciones hasta encontrar otra industria que se hiciese cargo.

Las negociaciones entre MGI, HB Fuller (al que restan diez años de concesión) y el Concello mosense ya han comenzado, pero no están cerradas, pues se trata de una operación a través de la cual HB Fuller debe ceder las instalaciones y realizar una subrogación de la concesión municipal. Antes de sopesar la opción de los terrenos de la antigua planta de adhesivos mosense, el Ayuntamiento ofreció a MGI Coutier ubicarse en el Polígono Empresarial de Mos (Pemos), promovido por la Xunta, pero el precio del terreno no se ajustaría a las necesidades de la multinacional francesa, que a principios del año pasado ya inauguró una planta en Paredes de Coura, a unos 50 kilómetros de Vigo, con una inversión de unos 30 millones de euros, como avanzó FARO. De no alcanzar el acuerdo en Mos, esta localidad sería la que se llevaría la producción de la planta de O Caramuxo.

Las instalaciones de HB Fuller, sin actividad y de titularidad municipal, serían las preferidas por costes y ubicación. Según fuentes municipales, la operación podría cerrarse en los próximos días, aunque todo dependerá del visto bueno del grupo en Francia. La razón última de este posible traslado es la necesidad de ampliar sus instalaciones en previsión de la carga de trabajo que tendrá la compañía en los próximos años tras las últimas adjudicaciones de proyectos como el K9 (la próxima generación de vehículos comerciales ligeros de PSA y Opel), entre otros, lo que llevaría también a aumentar su plantilla.

De concluir con éxito las negociaciones, la empresa se ubicará en Mos en un año. Fuentes sindicales indicaron que confían en que el traslado se lleve a cabo en un plazo breve y que de esta manera se aleje la posibilidad de una posible deslocalización de la actividad de la planta también a Paredes de Coura.

La planta lusa -MGI Lusitania, la segunda unidad de la multinacional gala en territorio portugués- se encuentra en la zona industrial de Castanheira (donde ocupa las antiguas instalaciones de la textil TexCoura) y recibió una inversión de unos 30 millones de euros, con la previsión de generar 70 puestos de empleo en el primer bienio, aunque con capacidad para llegar hasta los 150 empleados en función del mercado.

La factoría viguesa se creó en 1962 como proveedora de piezas metálicas y plásticas. En O Caramuxo, MGI combina la fabricación con el desarrollo de nuevos productos para los mecanismos de apertura del grupo. Las instalaciones de Vigo se centran en mecanismos (cierres de capó, maletero, doble puerta trasera, puertas correderas, etc.) y mandos de apertura. Sus principales clientes son PSA Peugeot Citroën, Renault, Ford, General Motors, Toyota, Opel, Seat y Dacia, entre otros. La planta participó en el desarrollo del nuevo sistema SCR (Selective Catalytic Reduction) de PSA que permite convertir las emisiones de óxido de nitrógeno (NOx) en vapor de agua y nitrógeno, adaptando las motorizaciones diésel de modelos como el Citroën Grand C4 Picasso y los Peugeot 508 y 308 a las exigencias de la nueva normativa medioambiental Euro6. En concreto, esta factoría asumió la fabricación de los depósitos de urea que utilizan los dispositivos SCR.

La situación de MGI coutier

  • MGI ya tiene fábrica en Paredes de Coura: El grupo francés del sector de componentes inaguró en 2015 un centro en Paredes de Coura, en el que invirtió 30 millones a priori para apoyar la producción de Vigo.
  • Más de 300 empleos y un centro de I+D+i: En las instalaciones de MGI en O Caramuxo trabajan algo más de 300 personas en producción y en el centro de desarrollo del grupo galo de mecanismos de apertura.
  • Necesidad de ampliar y por nuevos contratos: La firma necesita ampliar la fábrica de Vigo al ganar proyectos nuevos, pero en O Caramuxo no es posible. Mos se ofrece como destino para evitar que se vaya a Portugal.

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