La calderilla en que se ha convertido la caja de la Confederación de Empresarios de Galicia (CEG) no admite más retiradas y no solo debe abordar los gastos corrientes, sino que se le acumulan deudas con proveedores, las ocho plataformas Pexga, cinco bancos y el reembolso de 648.985,78 euros que exige la Xunta. Muchos frentes -y pocos posibles- que serán sofocados, o así lo espera la patronal gallega, con una tercera hipoteca sobre la sede por 1,5 millones de euros. Para lograrla debe aprobar un plan de viabilidad que será analizado el martes por su junta directiva y que prevé, como única medida de contingencia, la reducción de plantilla. El documento, al que ha tenido acceso FARO, establece tres escenarios con cinco, ocho y 14 despidos para evitar el concurso de acreedores. El economista que ha elaborado el plan, externo a la CEG, recomienda el primero.
Con la ejecución de cinco despidos de forma inmediata la organización que preside el ourensano Antonio Dieter Moure considera que tiene "garantizada" la concesión de financiación bancaria, pero con un coste extra de 150.305 euros de indemnización para los trabajadores afectados. Este es el llamado Escenario 3. "Al mantenerse todos los programas que se encuentran vigentes actualmente, e incluso con la posibilidad de poder incrementar su número, es prácticamente segura la obtención de la financiación externa que ese solicite, garantizándose con ello la viabilidad de la CEG", explica el autor del informe, elaborado por el economista compostelano Regino Gómez Villalobos.
En su previsión de resultados 2015-2019 el plan prevé un resultado de explotación y Ebitda positivo en todos los ejercicios. El principal sustento vuelve a ser el de "ingresos por programas", donde se incluyen los pagos del Plan Pexga. Este programa de promoción de las empresas en el exterior está vigente hasta final de año y todavía no se ha empezado a negociar su continuidad con el Instituto Galego de Promoción Económica (Igape), que el texto da por hecho. Los gastos de personal ascenderían a 823.133 euros este año por la indemnización de los despidos, pero se rebajarían hasta los 586.435 euros en los tres ejercicios posteriores. No hay ninguna referencia en el texto o en los cuadros económicos al impacto de la sanción de la Xunta por el incumplimiento parcial del Pexga, contra el que previsiblemente la CEG presentará un recurso de casación (para ganar tiempo) y un contencioso-administrativo. En todo caso no se prevé el desembolso de esta cantidad, al menos hasta 2019.
El Escenario 2 analiza las consecuencias para la CEG de prescindir de ocho trabajadores, y apenas difiere del primero. En ambos casos el estudio cree que está garantizada la tercera hipoteca, el Plan Pexga y los ingresos por cuotas, que superan los 340.000 euros anuales. Es el Escenario 1, el de los 14 despidos, el que desaconseja este economista. Con este planteamiento la patronal gallega pasaría a tener solo seis trabajadores y "quedaría reducida a una mera oficina administrativa, limitando su capacidad de acceder a nuevos programas", y se quedaría sin los ingresos del Pexga. Al superar los diez empleados afectados la reducción de personal tendría que hacerse a través de un Expediente de Regulación de Empleo (ERE), lo que conllevaría un "deterioro" de la imagen de la CEG y del "entorno de trabajo". Además sería inviable la consecución de la financiación bancaria, zanja el estudio.
Llama la atención que los tres supuestos el gasto financiero anual sería el mismo: 44.661 euros. Esto es, tendría el mismo importe tanto si la CEG lograse la tercera hipoteca de 1,5 millones como si no, con lo que no aparece previsto el gasto en amortizaciones. El resultado financiero sería negativo solo este año en más de 220.000 euros, lo que provocaría su "colapso económico". En este contexto lo previsible es que se apruebe el supuesto de los cinco despidos, si bien Dieter Moure todavía tiene pendiente la aprobación de cuentas de 2014 y 2015 y el presupuesto de 2016. Y, para sacarlas adelante, tendrá que modificar el censo electoral.
