La firma del contrato que permitirá a Navantia construir dos buques logísticos para Australia en la ría de Ferrol abre la puerta a un tercer barco. Según explicó ayer en Santiago el presidente de la compañía, José Manuel Revuelta, el acuerdo rubricado el pasado jueves incluye la "opción a que se construya un tercer" buque, y en ese "caso", avanzó, "será construido en las mismas condiciones que los dos primeros".

A la espera de que esa posibilidad se concrete, los astilleros gallegos de la empresa comenzarán a trabajar con los dos barcos "basados" en el BAC Cantabria, aunque con modificaciones a instancias del Gobierno australiano. Por ejemplo, explicó Daniel Blanco, director del programa AOR para Australia de Navantia, la incorporación de la reglamentación del país en protección medioambiental y de la Gran Barrera obligará a "adaptar" equipos y a incluir otros nuevos. Con estos matices, las obras comenzarán el 1 de julio de 2017 y se prolongarán hasta mayo de 2020.

Entre los números que desgranó el presidente de Navantia se incluye el que "en algunos momentos" la mano de obra para llevar a cabo los dos buques "estará por encima de los tres mil empleos, tanto directos como inducidos". En esa línea, destacó que el contrato, por unos 500 millones de euros (700 millones de dólares australianos), "es el mayor firmado para la ría de Ferrol en los últimos nueve años". Además destacó la "importancia" de que el pasado día 6 se firmase en Camberra otro contrato, el de mantenimiento de los buques, por un período inicial de cinco años tras su entrega. "Con la intención, con el deseo, de que si lo hacemos bien, y vamos a hacerlo bien, sea para el resto de los años", apostilló.

Revuelta enfatizó cómo el éxito de este contrato que fue el resultado, dijo, "del esfuerzo de muchos años", se produce en un contexto de "dura competencia", lo que pone de manifiesto la alta competitividad del astillero. En la misma línea se pronunció Gonzalo Mateo-Herrero, director comercial de Navantia, para quien el contrato permitió a Navantia mantener su "posicionamiento evitando la entrada de un gran competidor como eran los coreanos".

A juicio de Revuelta, la empresa pública tiene a día de hoy "una carga de trabajo" que le da "estabilidad" y que además le "permite consolidar" el proceso de "transformación" que inició en 2013, un proceso al que instó a sumarse a la industria auxiliar, tomando las decisiones que "considere oportunas", y con la colaboración de Navantia, "para también poder ser competitivos". "No solo para vender a Navantia, sino a otros astilleros internacionales", señaló. Por lo que respecta a los astilleros, apuntó que tienen que "modernizarse" y recordó que la "diferencia competitiva" no está en los sueldos de los trabajadores, sino en "los procesos, los calendarios, la forma de trabajar" o "los equipos multidisciplinares".

Para Revuelta, el actual posicionamiento de la empresa en Australia es "fundamental para lo que es el futuro programa de fragatas" del país, 9 en total. "Ya estamos en la lista corta junto a dos astilleros europeos, y lo mismo que luchamos por los AOR, vamos a luchar por este programa", proclamó. Si bien aclaró que las fragatas se construirán en Australia, "un porcentaje muy importante de dicho programa vendría a Galicia", dijo.

Para el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Fejóo, la adjudicación supone "un cambio radical de la situación de los astilleros de la ría, un futuro despejado par a los astilleros y, en definitiva, para las familias gallegas que trabajan en el sector". Feijóo explicó que "en este momento tenemos contratos por más de 2.200 millones de euros, sin contar con los 500 millones que acabamos de conocer esta mañana". "Dentro del próximo trimestre, se botarán los dos floteles de Pemex y la cifra que acabo de dar, los 2.200 millones, no incluye el BAM de Navantia, los recientes encargos de Cardama y los dos BAC. Así que estamos hablando de 19 buques en la cartera de pedidos", incidió.

Garantizó que la Xunta seguirá trabajando por el naval. "Aprovechando que venía el comandante en jefe de la Armada de Perú (a la botadura del "Carrasco" en Vigo), le hemos hablado de Navantia", comentó. "Le tenéis bastante convencido. Me da la sensación de que Perú puede ser un lugar al que Navantia pueda regresar en los próximos meses", señaló.