La denuncia de Aclunaga (Asociación Clúster del Naval Gallego) y el Foro Marítimo Vasco contra el sistema de ayudas holandés a la construcción naval parece haber caído en saco roto. Cuatro años y cuatro meses después de que se presentase la demanda en Bruselas, la Comisión Europea (CE) continúa revisando la documentación y todavía no ha tomado "ninguna decisión", según confirmó ayer un portavoz del Ejecutivo comunitario. Los astilleros nacionales consideran que la no apertura de un procedimiento de investigación formal del sistema neerlandés de ayudas al naval supondría un evidente trato discriminatorio respecto al recibido por España y confían en que la CE actúe a lo largo de este año.

Aclunaga y el Foro presentaron su denuncia en diciembre de 2012, en pleno colapso del sector en España tras la suspensión del antiguo tax lease un año antes a raíz de una denuncia de los astilleros holandeses. Las factorías neerlandesas fueron precisamente las mayores beneficiarias de la crisis del antiguo tax lease español, ya que en esos años recibieron pedidos por valor de más de 2.000 millones de euros mientras que en España las gradas se quedaban vacías y seis históricos astilleros echaban el cierre, lo que provocó la destrucción de miles de puestos de empleo (más de 8.000 solo en las rías de Vigo y Pontevedra, según cálculos sindicales). Pero el contraataque jurídico español contra las factorías holandesas sigue a la espera de respuesta.

La Dirección General de la Competencia, la misma que suspendió en 2011 el anterior sistema de bonificaciones fiscales que usaban los astilleros españoles para contratar, parece no encontrar pruebas suficientes para abrir una investigación formal al tax lease holandés. Un portavoz de la Comisión se limitó ayer a aclarar a preguntas de FARO que el Ejecutivo comunitario "ha recibido quejas sobre los astilleros holandeses" y que las está "estudiando". "La evaluación está en curso y la Comisión no ha tomado ninguna decisión al respecto", afirmó.

Ya en febrero del año pasado, en una comunicación de carácter preliminar, Competencia había informado de que no había pruebas suficientes que concluyeran que el sistema holandés de ayudas a los astilleros era selectivo y, por tanto, ilegal, por lo que para poder continuar con la investigación los denunciantes españoles debían aportar más información. Aclunaga y el Foro, con el apoyo de Pymar, presentaron nuevas alegaciones el 16 de marzo, en las que incluían pruebas adicionales que evidencian el carácter selectivo del régimen holandés, confiando en que, esta vez sí, sean apreciadas por la Comisión.

El sector naval español advierte de que la no apertura de un procedimiento de investigación formal del sistema holandés de ayudas supondría un evidente trato discriminatorio respecto al recibido por el naval nacional, sobre todo teniendo en cuenta el acoso al que el lobby neerlandés de astilleros ha sometido a las factorías nacionales, primero con la denuncia al primer tax lease -cuyas consecuencias son todavía hoy evidentes en la cartera de pedidos- y después con los dos recursos contra el nuevo sistema español de arrendamiento financiero aprobado por la propia Comisión, ambos rechazados por el Tribunal Europeo.