Cinco camiones españoles fueron abordados ayer en las cercanías del paso fronterizo de Le Boulou por un centenar de viticultores franceses, que vertieron a la calzada miles de litros de vino que llevaban en sus cubas para protestar por la llegada de una producción a la que acusan de hundir los precios.

Fuentes diplomáticas españolas indicaron a Efe que las cubas de dos de los camiones fueron íntegramente vaciadas, mientras que los tres restantes consiguieron salir con una parte de la carga.

Los viticultores que habían organizado la protesta son principalmente originarios del departamento vecino de Aude, que se quejan de la entrada de vino español a granel a precios que varían entre 30 y 40 euros por hectolitro, cuando los caldos franceses se sitúan entre 70 y 80 euros.