El Ibex 35 ha cerrado la sesión de este jueves con un leve avance del 0,18%, lo que ha llevado al selectivo a quedarse a las puertas de los 9.000 enteros (8.978,8) lastrado por las caídas de la banca.

En el mercado de deuda, la prima de riesgo se ha colocado en 120,2 puntos básicos, con la rentabilidad del bono a diez años en el 1,431%. Mientras, en el mercado de divisas, el euro se intercambiaba a 1,1322 dólares.

ArcelorMittal ha liderado los avances con un repunte del 9,51%, seguido de OHL (+4,39%) y Acerinox (+3,81%). Repsol, que ha ganado un 2,49%, y Merlin (+2,17%) han completado los cinco primeros puestos del ranking de ganancias.

Por el contrario, Popular se ha convertido en el 'farolillo rojo' de la sesión con un recorte del 3,2%, seguido de Bankia (-2,8%) y Bankinter (-1,8%). Grifols, que ha cedido un 1,5%, y Sabadell (-1,2%) tampoco han conseguido aguantar el tipo.

Pese a que el índice ha iniciado la jornada con alzas superiores al 1%, animado por la decisión de la FED, conforme ha ido avanzando la sesión ha perdido fuelle hasta cerrar con un pequeño avance.

Salvo Inditex (-0,3%) y Telefónica (-0,2%), que han cerrado en 'números rojos' el resto de los 'blue chips' se han anotado ganancias que han oscilado entre el 2,4% de Repsol y el 0,2% de BBVA. Santander ha subido un 0,7%, Endesa un 0,3% e Iberdrola un 0,2%.

De este modo, el Ibex se ha mantenido en positivo junto con Londres, que ha avanzado un 0,2%, y se ha distanciado de Francfort, que se ha dejado un 1,1%, y de París (-0,7%).

LA RELACIÓN EURO-DÓLAR, EL CATALIZADOR

El estratega de mercados de IG Daniel Pingarrón ha señalado que la relación entre el euro y el dólar ha desplazado al petróleo "como principal catalizador del mercado" en estos momentos, siendo "algo extraño" el movimiento que se está viendo en el par.

"Los niveles actuales del EUR/USD no son fáciles de entender", ha indicado el experto, quien ha apuntado que la subida del par está beneficiando a las materias primas y a sus sectores relacionados, "con el crudo alcanzando nuevos máximos anuales", una cuestión que, a su juicio, está quedando en un segundo plano.

Además, ha advertido de que el nivel de 1,13 no parece una zona de equilibrio óptima para el EUR/USD, "que probablemente reaccione con caídas en el momento en el que se publiquen datos macroeconómicos europeos decepcionantes o datos americanos que superen las expectativas", como ha ocurrido en el pasado.