Modelo de Citroën berlingo eléctrico
Hace veinte años, por estas fechas, el Sistema 1 de la planta de Vigo de PSA Peugeot Citroën comenzaba con las preseries de los primeros vehículos comerciales ligeros Citroën Berlingo y Peugeot Partner, dos modelos que catapultaron la fábrica como centro piloto del grupo y que con la generación posterior se convertirían en las furgonetas made in Spain más vendidasmade in Spain en todo el mundo, con algo más de 5,3 millones de unidades. Dos décadas después, y con su continuidad asegurada tras la adjudicación en diciembre de 2014 del proyecto K9 (que incluye una tercera silueta para Opel), estas dos furgonetas continúan demostrando su liderazgo y representan el 55% de la producción de Balaídos.
El primer lanzamiento, en la primavera de 1996, supuso un antes y un después para el centro vigués. El proyecto M59 (su código industrial) permitió la inversión de 33.000 millones de las antiguas pesetas, casi 200 millones de euros al cambio actual, para la modernización de las instalaciones, sobre todo de los talleres de embutición, ferraje y montaje. Por aquel entonces, la planta ensamblaba los modelos de Citroën AX, el ZX de tres puertas y la emblemática furgoneta C-15, con una producción anual de 280.000 unidades (dato de 1995). Pero el aterrizaje de los Berlingo-Partner lo cambió todo.
GALERÍA |La producción en serie de la primera generación de Berlingo-Partner arrancó en mayo de 1996, coincidiendo con la visita a la planta del entonces Príncipe Felipe, que probó personalmente uno de esos primeros modelos.GALERÍA
Solo con este lanzamiento, Balaídos incorporó unos 2.500 trabajadores en plantilla, en parte por la creación del turno de noche, una de las principales medidas de flexibilidad laboral de PSA-Vigo. Además, la transformación que sufrió entonces la planta -de la misma magnitud que la actual- allanó el camino a la llegada de un segundo lanzamiento dos años después, el del Xsara Picasso, con una inversión de unos 25.000 millones de pesetas (unos 150 millones de euros). La producción en serie de los primeros Berlingo-Partner arrancó en mayo de 1996, coincidiendo con una visita al polígono de Balaídos y a la fábrica del entonces Príncipe Felipe, y un mes después se llevó a cabo su lanzamiento comercial, con una previsión de ventas para su primer año de 100.000 unidades.
La importancia de este lanzamiento fue tal que incluso estuvo salpicado por un presunto caso de espionaje industrial. Tres cargos intermedios vinculados al desarrollo de proyecto fueron entonces despedidos y acusados de pasar información sobre los modelos a Renault, en concreto, datos sobre el nuevo sistema de puerta lateral de corredera que estrenaron ambas furgonetas. Estas acusaciones no pudieron probarse, pero un año después del lanzamiento de las Berlingo-Partner, en cuyo desarrollo PSA trabajó más de cinco años, Renault lanzaba el Kangoo, hasta hoy en día el principal competidor de las furgonetas de Balaídos. Este episodio, que ya forma parte de la historia más desconocida de PSA-Vigo, obligó a la factoría a extremar la seguridad en torno a la información sobre los nuevos lanzamientos, cautela que se extendió después a todo el panel de proveedores de la multinacional francesa en Galicia.
El éxito de los primeros Berlingo-Partner fue refrendado a principios de 2008 con el lanzamiento de la segunda generación (proyecto B9), que ha sido renovada en dos ocasiones y continúa pisando fuerte en el mercado, hasta el punto de que el año pasado se fabricaron 226.000 unidades solo en la planta de Vigo (el 55% del total de vehículos producidos), a las que se suman otras 46.000 unidades de la factoría portuguesa de Mangualde, en lo que ha sido su mejor año desde 2011. En total, el grupo ha comercializado hasta la fecha más de 5,3 millones de unidades de las dos generaciones de Berlingo-Partner, cifra que los consolida como las furgonetas españolas más vendidas en todo el mundo. Es más, uno de cada dos vehículos comerciales ligeros que se ensamblaron el año pasado en España fueron Berlingo-Partner.
La automoción gallega confía en que el proyecto K9, que supondrá una inversión de 600 millones solo por parte de PSA (unos 1.800 millones sumando a los proveedores), dé continuidad al éxito de la estirpe Berlingo-Partner. El tiempo lo dirá.
