Nuevo trueque entre gigantes del automóvil. La multinacional francesa Faurecia (filial del grupo PSA Peugeot Citroën) ha llegado a un acuerdo para la venta de toda su división de componentes exteriores (parachoques, aletas, portones traseros, etc.) a la también gala Plastic Omnium (PO), en una operación valorada en 665 millones de euros, según confirmaron ambas empresas. La transacción, que se cerrará a lo largo del próximo año, afecta a 22 centros de producción, el 90% de los cuales están en Europa, cinco de ellos en España: Madrid, Barcelona, Valladolid, Tudela y Valencia. La venta no perjudicaría a priori a la planta de parachoques de PO en Redondela, que aspira a recibir carga de trabajo del proyecto K9 de PSA-Vigo, aunque habrá que esperar a cómo reorganiza el grupo su estructura en España, según apuntaron fuentes sindicales.
El acuerdo excluye la planta de composites de Hambach en Francia (que trabaja para Smart) y dos joint ventures en Brasil y China. La operación beneficia a ambas empresas, ya que por una parte Faurecia reducirá su deuda prácticamente a cero y contará con fondos para invertir en el resto de componentes en los que está más interesada, como los sistemas de control de emisiones (cuya demanda se ha disparado tras casos como el escándalo del Dieselgate de Volkswagen), entre otros. Por su parte, PO reforzará su músculo industrial con las nuevas plantas y se consolida en un segmento como el de los parachoques. La compañía cuenta con dos plantas en la comarca viguesa, una precisamente de parachoques en Redondela y otra de sistemas de carga de combustible en Vincios (Gondomar).
En España, la operación afecta directamente a cinco plantas de Faurecia, con más de 1.500 trabajadores, según cálculos sindicales. Se trata de los centros de Madrid, Barcelona, Valladolid, Tudela y Valencia, que fabrican todo tipo de componentes exteriores mediante la estampación de plástico. En lo que respecta al centro de Redondela de PO, la integración de las plantas de Faurecia no debería a priori afectar a su actividad, aunque dependerá de cómo se organice el aparato industrial de PO tras la operación. Esta planta aspira a fabricar las defensas delanteras y traseras del proyecto K9 de PSA-Vigo, lo que catapultaría su trabajo.
También ha quedado excluida de la venta la fábrica de Faurecia Automotive España en Ourense (que comparte algún rango de componentes con la división afectada). Precisamente ayer el conselleiro de Economía, Emprego e Industria, Francisco Conde, visitó esta fábrica, con unos 400 trabajadores y que produce para Renault (para el nuevo Mégane) y PSA (C4 Picasso). La compañía se cayó no obstante de la puja por el K9, según fuentes del sector. Faurecia cuenta con tres plantas más en Galicia, dos en Vigo y una tercera en Porriño.
