La Bolsa española rompió ayer con diez sesiones consecutivas a la baja, su peor racha en los 24 años de historia del índice que los expertos achacan a factores externos sumados a la incertidumbre electoral. En la sesión de ayer la Bolsa se disparó el 3%, lo que ha permitido recuperar los 9.700 puntos ayudada por la mejora del precio del petróleo.

A la espera de que la Reserva Federal de Estados Unidos (Fed) decida hoy si sube los tipos de interés y pone fin a su política expansiva, el principal indicador nacional, el Ibex 35, cerró ayer en 9.711,60 puntos, tras anotarse 283,10 puntos. El incremento del 3% supone su mayor escalada desde principios de octubre. Con la subida de ayer, las pérdidas en el acumulado del año se reducen al 5,52%.

Todas las empresas que cotizan en el Ibex 35 cerraron la jornada en positivo, encabezadas por Arcelor-Mittal, con una subida del 5,94% tras ser una de las compañías más castigadas en las jornadas anteriores. El rebote de ayer del Ibex contrasta con las caídas consecutivas de los últimos diez días, una marca histórica que los expertos vinculan, sobre todo, a factores externos.

"Hay que tener en cuenta, en primer lugar, las dudas sobre el crecimiento de países emergentes donde las grandes empresas españolas tienen muchos intereses, como puede ser Brasil, y en segundo lugar la incertidumbre que genera en los mercados la decisión sobre la subida o no de los tipos de interés en Estados Unidos", señaló Francisco González, catedrático de Economía Financiera.