El ministro de Industria, Energía y Turismo, José Manuel Soria, aseguró ayer que el grupo Volkswagen se encargará de devolver al Tesoro las ayudas recibidas por los planes PIVE después de haber "trucado" las etiquetas de emisiones de dióxido de carbono (CO2), así como la diferencia en el impuesto de matriculación que hayan pagado los compradores de los coches afectados. No obstante, afirmó que el Gobierno no se plantea tomar otras medidas contra la empresa y aseguró que está a la espera de recibir la relación de vehículos afectados por este caso para contrastarla con los datos del Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía (IDAE) y determinar el importe que deberá devolver la empresa.

En relación con el impacto sobre el grupo automovilístico de los casos de las emisiones, Soria indicó que espera que no tengan un efecto negativo sobre España y resaltó que cada vez que han hablado con representantes de la empresa, en España y en Alemania, éstos afirman que el programa de inversiones en este país no está afectado tras el escándalo.

Asimismo, Soria se mostró partidario de que el sector del automóvil en España debería seguir teniendo ayudas, como el Plan PIVE, a lo largo de 2016, aparte de en los primeros meses, como se recoge en la recién aprobada extensión hasta julio de la octava edición de este programa. "Ya veremos cómo evolucionan los seis primeros meses del próximo año, pero creo que el sector del automóvil a lo largo de 2016 deberá seguir teniendo ayudas, aunque eso ya lo tendremos que ir viendo", afirmó en una entrevista concedida a Europa Press.