La fusión de las Cámaras de Comercio de Vigo, Pontevedra y Vilagarcía, que se iba a formalizar en septiembre, está aún pendiente de un "informe jurídico" requerido por la Xunta de Galicia. En concreto, según explicó ayer el presidente del ente vigués, José García Costas, la Cámara de Pontevedra es la única que no ha cumplimentado todos los requisitos para formalizar la integración. García Costas confió en que dicho informe de la Consellería de Industria esté listo "antes de que finalice este mes". Otras fuentes consultadas indicaron que el conflicto interno del organismo cameral pontevedrés es la razón que ha dificultado y retrasado el proceso.