El metal ha cerrado filas en torno a Enrique Mallón. Los presidentes de Asime (Asociación de Industriales Metalúrgicos de Galicia), Atra (la patronal de los talleres de Pontevedra) e Instalectra (la asociación provincial de empresarios de telecomunicaciones y electricidad) cargaron ayer contra el presidente de la Confederación de Empresarios de Galicia (CEG), José Manuel Fernández Alvariño, por sus críticas al portavoz de las asociaciones que están negociando el convenio colectivo del sector del metal de Pontevedra (y secretario general de Asime), al que achacó el desencuentro sufrido entre empresarios y sindicatos el pasado jueves.

"No está ejerciendo como líder empresarial; fomenta la desunión, lo que demuestra su estado actual de desorientación", manifestó el presidente de Asime, Julio Gómez, en alusión al conflicto interno que sufre la CEG. Los empresarios comparecieron ayer públicamente en Vigo para defender el trabajo de Mallón y anunciar que harán un "último esfuerzo" para acercar su oferta a lo que piden los sindicatos para cerrar la negociación del convenio. Las centrales, por su parte, acudirán hoy a la reunión convocada por las organizaciones empresariales con "cautela".

"Podemos llegar a entender lo difícil que debe ser asumir su situación en la CEG, pero no podemos asumir en ningún concepto que interfiera en las negociaciones de este convenio, posicionándose además en un momento crítico a favor de tesis infundadas", señaló el presidente de Atra, Enrique Fontán. Alvariño había emplazado la semana pasada a Mallón a centrarse en "cerrar el convenio del metal" en vez de "liderar" la sublevación en la CEG en su contra, y le atribuyó la ruptura de las negociaciones sufridas el pasado jueves que denunciaron los sindicatos. "No han explicado por qué abandonaron las negociaciones, y yo exijo esa explicación", afirmó en declaraciones a FARO.

Fontán le reprochó que se posicionase "a favor de rumores manifestados por la parte sindical, que en este caso no se corresponden con la realidad". "Es decepcionante leer las manifestaciones en las que afirma que la parte empresarial abandonó la mesa de negociación del convenio. Es rotundamente falso", recalcó.

Con respecto al convenio, el presidente de Instalectra, Ignacio Piñeiro, precisó que han trasladado a sus asociados las posturas de los sindicatos de cara a plantearse "un esfuerzo para ver a dónde -pueden- llegar en la siguiente reunión", con el objetivo de "tratar de acercar posturas" y poder sellar el acuerdo. El borrador de la patronal incluía 16 propuestas, donde "la mayor parte" fueron "aceptadas por ambas partes", si bien no se llegó a acuerdo en los puntos referidos al contrato de eventualidad y el incremento salarial. "Son los dos únicos puntos que a nuestro entender quedan por cerrar. El pastel está terminado, falta poner las guindas y en eso estamos", explicó Piñeiro.

Patronales y sindicatos volverán a reunirse esta tarde en Vigo para tratar de desbloquear la negociación del convenio, que ha encallado principalmente en dos puntos: salario y eventualidad. Los empresarios plantean una subida del 0,5% para este año y del 1% para el próximo, vinculada a reducir la indemnización por eventualidad del 20% actual al 12%, que se cobraría además al rematar el contrato del trabajador y no mensualmente, como en la actualidad.