Faro de Vigo

Faro de Vigo

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

El futuro de la multinacional pesquera

Pescanova salva su última filial en quiebra a un mes de ser controlada por los bancos

Un juzgado de Buenos Aires aprueba el convenio de Argenova con quitas entre un 15 y un 78%

Estand del Grupo Pescanova en la última edición de la feria Conxemar. // José Lores

La producción de langostino vannamei en Centroamérica (Nicaragua y Honduras) y las campañas de langostino en Argentina se convirtieron en 2013 y 2014 en músculo de hormigón para los pilares de la Pescanova más enclenque, desnutrida. La filial del grupo en el país del tango y el bandoneón, Argenova, solicitó el concurso preventivo (suspensión de pagos) el 3 de mayo de 2013 como consecuencia de la quiebra de Pesca Chile. Con 18 buques -15 propios y tres arrendados, según el informe concursal-, la compañía nunca dejó de operar y Argentina, un país con uno de los mejores caladeros del mundo y donde el 85% de la población no consume pescado, volvió a convertirse en una referencia para la compañía gallega 52 años después de la singladura del Lemos. El pasado viernes el Juzgado de lo Comercial número 25 de Buenos Aires homologó la propuesta de acuerdo del convenio y ratificó así la salvación -a falta de la sentencia en firme- de la única subsidiaria que aún estaba en concurso a un mes de que la banca asuma el control de la multinacional.

Según la sentencia del juez Horacio Francisco Robledo, a la que ha tenido acceso FARO, un "comité definitivo de acreedores" se encargará de velar por el cumplimiento del convenio. Estará formado por Banco Sabadell, el brasileño Banco Itaú, UBI Banca (italiano), el alemán Deutsche Bank y un representante de los trabajadores. El pasivo que tendrá que reintegrar la compañía, de acuerdo a la misma documentación, asciende a poco más de 58,7 millones de euros, que serán abonados en cuotas mensuales en plazos que oscilarán entre uno y 14 años. Al activo de Argenova es de 82,8 millones de euros, según las cuentas del síndico (administrador concursal). Pese a estas cifras, Pescanova cifró en 44 los millones en los que se reducirá su deuda como consecuencia de la salida de concurso de Argenova. La compañía ha decidido, a preguntas de este diario, no valorar este dictamen judicial hasta que éste no sea firme.

La propuesta de acuerdo de la subsidiaria argentina ya fue considerada como "razonable" por sus administradores concursales, y solo la entidad suiza BIC-Bred mostraba reticencias a la hora de apoyarla. Como sucede con la normativa concursal española, el plan de pagos distingue entre distintos tipos de acreedores y ofrece dos alternativas para alguna de las categorías. A menor plazo de pago, mayor quita. El único acreedor con privilegio especial de origen bancario es Banco Patagonia SA, a quien "se le reconoce un saldo adeudado" de 1.083.485 euros, y cuyo montante se cancelará en ocho cuotas. Para los acreedores con privilegio especial -proveedores, se establece una quita de un 35% y los pagos comenzarán a abonarse a partir del 10 de septiembre de 2016.

En el caso de las deudas con los trabajadores se cancelará el 85% de la deuda (quita del 15%), pero en este caso los empleados percibirán su dinero en 36 cuotas que comenzarán a devengarse en tres meses. Los acreedores con privilegio general sufrirán quitas del 45%, mientras que los que no gocen de privilegio pueden escoger entre una quita del 40% y un plan de pagos a 14 años o perder el 78% de su pasivo y cobrar en seis meses a contar desde el pasado 30 de octubre.

"A partir del séptimo año Argenova destinará el 30% de sus excedentes anuales de caja, una vez cubiertos los servicios totales de la deuda, a la amortización anticipada de capital adeudado" para el caso de los acreedores que hubiesen optado por una menor quita. Una vez sea firme la decisión judicial, Argenova aportará un patrimonio de unos 40 millones al grupo, con lo que Nueva Pescanova SL sí podrá arrancar su historia con 100 millones de euros de patrimonio.

Compartir el artículo

stats