El Tesoro Público coloca 2.236 millones de euros en una emisión de letras a 3 y 9 meses y vuelve a ofrecer a los inversores intereses negativos en ambas referencias. De esta forma, el organismo se ha quedado en la parte baja del rango, ya que esperaba captar entre 2.000 y 3.000 millones. La demanda, por su parte, ha sido alta y ha superado los 8.000 millones, casi cuatro veces lo emitido.