Más de 200 personas, mayoritariamente delegados sindicales del metal, han recorrido este miércoles las calles de Santiago convocados por la CIG para exigir a la patronal la negociación de un convenio gallego para este sector.

Al grito de 'convenio del metal solución' y 'negociación y no imposición', la manifestación ha partido a las 11,00 horas de la Alameda compostelana para dirigirse a la sede de la Confederación de Empresarios de Galicia (CEG), donde una representación de los delegados ha entregado un escrito que recogía sus demandas.

En concreto, el texto insta a la organización que preside José Manuel Fernández Alvariño a dirigirse a las sectoriales del metal (como Asime) para que "levanten los vetos" que, según denuncia la central, están impuestos para renovar los convenios de las cuatro provincias.

Además, el documento reclama que, en cualquier caso, "se respete el incremento económico" de los trabajadores a partir del 1 de enero en aquellos casos en los que los convenios no se negocien antes de que termine el año.

"Más que paralizada"

En declaraciones a los medios de comunicación antes de arrancar la marcha, Xoán Bouzas ha denunciado que la negociación colectiva en el mbito del metal está "más que paralizada" y ha urgido la renovación de los convenios "ya, antes de fin de año".

Al respecto, ha atribuido la falta de negociación a "una estrategia de la patronal para no respetar los incrementos económicos en los últimos años", y ha advertido que, como consecuencia de que no haya convenios renovados, "cada empresa y cada provincia" incurre en "competencia desleal" con otras.

A mayores, al estar "vencidos" los convenios correspondientes a las cuatro provincias, Bouzas ha determinado que es "el momento" para negociar "un convenio gallego del metal".

Después de acudir a las oficinas de la CEG, en el casco histórico de la capital gallega, los delegados, acompañados por el secretario xeral de la CIG, Suso Seixo, se han dirigido al Consello Galego de Relacións Laborais, donde han presentado otra solicitud con la que pretenden que esta institución demande a las empresas "que negocien los convenios".