Cuando el juez Pablo Ruz se encargó del caso Pescanova en mayo de 2013 encomendó a la Unidad Central de Delincuencia Económica y Fiscal (UDEF) la elaboración de un "informe patrimonial" para detectar "eventuales cambios significativos operados en el patrimonio" del expresidente de la multinacional Manuel Fernández de Sousa y "su entorno familiar". Casi dos años después la Policía se ha encontrado con una maraña de operaciones entre empresas controladas por el empresario y su esposa, Rosario Andrade. La conclusión del informe, según un auto dictado el pasado día 23, es rotunda: la UDEF "no ha podido localizar" pagos realizados por Sousa por importe de 3,45 millones de euros.

El primero de ellos se corresponde con la venta de participaciones de la empresa Kiwi España por parte de Sociedad Anónima de Desarrollo y Control (Sadeco) a Quinta do Sobreiro SL. El importe de la operación ascendió a 949.839,44 euros, y la Policía ha sido incapaz de "localizar" este pago. Por este motivo el juez instructor ha dado un plazo de cinco días a Fernández de Sousa para que "aporte los soportes documentales que justifiquen el pago" de esa cantidad a Sadeco "por la adquisición de acciones de Kiwi España".

El segundo hace referencia a la compraventa de participaciones de la propia Sadeco que se llevó a cabo entre los años 2012 y 2013. "El saldo necesario" para que esta empresa abonara la adquisición de las acciones a Fernando Fernández de Sousa -hermano del expresidente y exconsejero- se pudo realizar, según la UDEF, "gracias al dinero llegado desde Inverpesca tras la venta de acciones de Pescanova en una secuencia de transacciones innecesariamente compleja". Sousa habría incrementado su control en Sadeco gracias a la compra de títulos a su esposa y a su hermano, y se financió en todo caso -de acuerdo con la Policía- con la venta de títulos de la pesquera incluso "tras la declaración de preconcurso de acreedores". "Este aumento de control por parte de Manuel Fernández de Sousa no fue comunicado a la CNMV" y, continúa el auto, "no se han podido localizar los 2,5 millones que Fernández de Sousa declara haber pagado a su esposa" por la compraventa de títulos de Sadeco en abril de 2012. Sousa tiene cinco días para justificar esta operación. Asimismo, el juez ha ordenado a Barclays Bank y al BBVA a que aporten toda la documentación disponible sobre las cuentas de Rosario Andrade.