El Ministerio de Fomento ha decretado unos servicios mínimos del 77 % en trenes AVE y de larga distancia y de entre el 65 y 63 % en trenes de media distancia con motivo de la huelga convocada en el sector ferroviario para el 31 de julio y el 1 de agosto, coincidiendo con la operación salida de vacaciones.

Asimismo, el departamento que dirige Ana Pastor ha decretado en Renfe unos servicios mínimos de entre el 50-75 % en Cercanías.

Por lo que respecta a Adif, se van a garantizar los servicios esenciales durante el desarrollo de la huelga con el 20,86 % de los puestos de trabajo, según señala en un comunicado.

Estos servicios mínimos, añade Fomento, tienen como objetivo compatibilizar el interés general de los ciudadanos y, en particular, sus necesidades de movilidad, con el derecho de huelga de este colectivo de trabajadores.

El pasado viernes, el Comité de Empresa de Adif ratificó la huelga convocada para los días 31 de julio y 1 de agosto, coincidiendo con la operación salida de vacaciones, por 9 votos de la mayoría (CCOO, CGT, SCF y SF) y frente a los 4 de UGT, que finalmente decidió descolgarse.

El 10 de julio, los sindicatos que integran el comité general de empresa de Adif decidieron entonces por unanimidad convocar una huelga de 46 horas seguidas desde la una de la noche del 31 de julio hasta las 23.00 horas del 1 de agosto, y ya avanzaron que estaban valorando ampliarla a Renfe.

Tras la propuesta planteada por Adif a los sindicados, CCOO consideraba que era aún confusa y que no garantizaba su futuro como empresa pública, así como la creación de empleo de calidad, por lo que decidieron mantener su convocatoria.

Además, el pasado 16 de julio CCOO convocó una huelga para el próximo 31 de julio en Renfe desde la 1:00 hasta las 24:00 horas para protestar por el incumplimiento de aspectos "esenciales" recogidos en el II convenio colectivo firmado en 2012 y por la falta de personal y de contratación.

Para evitar el conflicto, el sindicato aseguraba que la compañía debe adoptar con urgencia nuevas contrataciones (en torno a 1.400), al entender que el Grupo Renfe tiene un importante déficit de recursos humanos respecto a las necesidades actuales de crecimiento y de futuro con la construcción de nuevas líneas de alta velocidad y la potenciación de las mercancías.