Vigo mantiene su liderazgo en España en la comercialización de productos del mar congelados pese a las crisis que padecen referentes del sector como Pescanova, Freiremar o Vieira. Lo demuestra el ranking nacional que elabora Alimarket sobre las principales comercializadoras de pescados y mariscos congelados del país, en el que ocho de las diez primeras empresas tienen su central en la comarca viguesa. En 2007, un año antes del estallido de la crisis financiera internacional, las pesqueras olívicas ocupaban seis de las diez primeras posiciones. Las caídas de esas tres empresas, sobre todo de Pescanova (el primer operador nacional), han provocado nuevos equilibrios en el mercado, beneficiando a otras compañías como Pescapuerta, Iberconsa o Marfrío, que han aumentado sus ventas por la vía de la internacionalización y el crecimiento de redes comerciales.

El concurso de acreedores de Pescanova y su posterior reestructuración han dado la mayor sacudida al sector. Según la estimación elaborada por Alimarket, Pescanova pasó de mover 150.000 toneladas de producto en 2012 a 130.000 el año en que entró en concurso, un 13,3% menos (20.000 toneladas menos). Los resultados del presente ejercicio serán incluso inferiores por la pérdida de filiales claves como Pesca Chile, Acuinova y Pesca Austral, que juntas facturaban más de 200 millones de euros y aportaban el 30% del ebitda (beneficio neto) del grupo. Pesca Chile, con una cuota de pesca de merluza del 47% en aguas chilenas, vendía el 90% de su producción a empresas de Pescanova.

El segundo gran impacto del sector proviene de Freiremar, pesquera con puerto en Las Palmas de Gran Canaria pero de raíces viguesas. La compañía pasó de las 35.000 toneladas en 2012 a apenas 13.000 en 2013. En 2007 había alcanzado las 65.000 toneladas. Freiremar está en concurso de acreedores desde diciembre y ejecutó un Expediente de Regulación de Empleo (ERE) para 322 trabajadores, 101 de los cuales pertenecían a la delegación de Vigo. Su pasivo roza los 151 millones, como avanzó FARO.

Otro grupo pesquero de Vigo que vio reducida su dimensión es Vieira, que movió en 2013 unas 9.000 toneladas, frente a las 10.000 de un año antes o las 40.000 de 2007. Vieira superó el concurso de acreedores a finales del año pasado tras acometer una profunda reestructuración del grupo que le llevó a liquidar sociedades, vender filiales claves como la de Namibia (ahora en manos de Ibérica de Congelados-Iberconsa) y ajustar plantilla para garantizar su viabilidad. La firma sigue trabajando para recuperar su filial argentina, expropiada por el Gobierno de la provincia de Santa Cruz.

Frente a las caídas de Pescanova, Freiremar o Vieira, Iberconsa logró aumentar sus ventas de las 45.000 toneladas a las 50.000, según el informe de Alimarket. Este crecimiento se ha debido, entre otras medidas, a la compra de las instalaciones namibias de Vieira en Walvis Bay, en el segundo trimestre de 2013. Iberconsa también cerró la adquisición de la armadora argentina Ibermar a finales del año pasado, sumando otros 2.000 metros cúbicos de capacidad frigorífica a sus instalaciones. También Pescapuerta, el segundo operador nacional tras Pescanova, aumentó sus ventas, pasando de 51.200 toneladas a 52.975. La pesquera viguesa ha aparcado la venta de su filial namibia (Tunacor Group).

La marinense Marfrío, por su parte, cerró hace un año la compra del 60% de Vieira Perú para consolidar su actividad de elaboración de potón peruano, que espera que dé beneficios este mismo año. Para Galicia, la compañía también anunció inversiones con una nueva línea de limpieza de calamar para la planta de Marín que se suma a una de transformados que adquirió el año pasado. Otra compañía que también aumentó ventas fue Grupo Profand (fusión de Promar y Fandiño), de 40.000 a 42.000 toneladas, mientras que Mascato y Botas mantuvieron sus cifras.